“La promesa es que el 25 de mayo de 2025 cesa definitivamente la guerra de décadas entre el ELN y el Estado de Colombia”, dijo el presidente Gustavo Petro al cierre del tercer ciclo de negociación con esa guerrilla en La Habana (Cuba), el pasado 9 de junio.
Dicho anuncio, que se hizo con bombos y platillos, fue celebrado por diferentes sectores al considerar como positivo que se acabaría el conflicto con los criminales del ELN que van a completar 60 años de daño y muerte en Colombia.
Sin embargo, las intenciones del presidente Petro serán postergadas porque ya quedó claro que la guerrilla del ELN no firmará ningún acuerdo de paz en esa fecha y la negociación perdurará a lo largo de los años, y seguramente llegará un nuevo gobierno a la Casa de Nariño y no pasará nada con los diálogos de paz.
Así lo confirmó Carlos Villareal, integrante del mando político-militar del Frente de Guerra Oriental del ELN, quien manifestó que tienen toda la voluntad de paz, pero que no irán al ritmo ni a las conveniencias políticas del presidente Gustavo Petro.
“Consideramos que el proceso de paz con el ELN no concluye en mayo del 2025, concluye un punto de la mesa de diálogo, pero para nosotros considerar si se usan o no las armas, eso se determinará con base en los avances y cambios estructurales”, dijo el guerrillero.
Así mismo, indicó que el tema de la dejación de armas no se ha contemplado y que la discusión debe abordarse en su momento, pero no de la manera que quiere el Gobierno nacional.
“Consideramos que la paz es posible y la queremos, pero sobre el marco de los cambios y sin que haya vetos de temas. Se debe hablar de la doctrina militar, el sistema económico, lo estructural del Estado, derechos fundamentales y otras cosas”, reiteró el comandante guerrillero.
Pese a que la dejación de armas y la firma de un acuerdo de paz está muy lejos, este comandante guerrillero dijo que el Frente de Guerra Oriental del ELN se siente representado en los delegados que están en la mesa de diálogo y que la hoja de ruta que se estableció es la indicada parea buscar salidas negociadas al conflicto.
“Hay una hoja de ruta y esa hoja de ruta está en el marco del cómo concebimos nosotros el proceso de paz. Para nosotros la paz son cambios estructurales en la sociedad y el Estado colombiano, así que esas son nuestras apuestas”, dijo el guerrillero.
Así las cosas, una vez más la guerrilla del ELN desmiente al presidente Gustavo Petro y la firma del acuerdo de paz será un enigma y corresponderá a los avances que tenga la mesa de diálogo.
Mientras se da este pronunciamiento de uno de los frentes más sanguinarios del ELN, las delegaciones de paz están dialogando en México, donde se desarrolla el quinto ciclo de paz.
Sobre este encuentro se espera que haya un acuerdo para que esta organización criminal libere a todos los secuestrados y deje esa acción delincuencial en todo el territorio nacional.
Sin embargo, en varias ocasiones Antonio García ha dicho que para llegar a tal acuerdo el Gobierno debe buscar un mecanismo de financiación para el ELN, ya que requieren un sostenimiento económico para todos sus integrantes. Además, dijo que si no se pactaba un tema en ese sentido, no se continuaría con el cese al fuego bilateral que está pactado y terminará su vigencia en enero de 2024.
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