El expresidente Ernesto Samper no parece salir del asombro porque nuevamente Colombia está ante la mirada del mundo y no precisamente como ejemplo. El exmandatario, como varias figuras políticas, han mostrado su preocupación porque seis colombianos estarían detrás del asesinato del candidato presidencial de la derecha en Ecuador, Fernando Villavicencio, ocurrido durante esta semana en Caracas.
“Preocupante la noticia sobre la nacionalidad colombiana de los asesinos del candidato Villavicencio en Ecuador, que coincide con la del asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse, y los exdirigentes guerrilleros de las Farc en Venezuela, a cargo de sospechosos comandos paramilitares”, dijo.
Y también preguntó: “¿por qué nos volvimos, ahora, exportadores de matones y asesinos?”.
El crimen de Fernando Villavicencio ocurrió cuando ni siquiera el país había superado el asesinato del presidente de Haití, en el 2021, y que provocó la captura de 18 mercenarios colombianos que, al parecer, participaron y habrían orquestado el crimen de Estado en la capital haitiana.
En el caso de Villavicencio, las autoridades han podido determinar que dos de los seis colombianos capturados, presuntos responsables del magnicidio, ingresaron días antes a Ecuador.
Tanto las autoridades colombianas como las ecuatorianas confirmaron esta hipótesis y se están aportando pruebas y detalles para determinar los autores intelectuales que estuvieron detrás del atentado contra Villavicencio.
Las dos personas serían Andrés Manuel Mosquera Ortiz, de Cali, Valle del Cauca, y José Neider López Hitas. En relación con el primero, no tenía antecedentes en su contra, pero en el sistema judicial de Colombia registra un proceso privado que se encuentra en el Juzgado Décimo Penal con función de Conocimiento de Cali.
Además, Mosquera Ortiz cumplió en 2018 una pena de cuatro años por fabricación y tráfico de armas de fuego y municiones, en la cárcel de Popayán.
En el caso de López Hitas parece que sí tiene antecedentes con la justicia colombiana, por lo que su prontuario fue fácil de detectar con un antecedente penal por hurto calificado en menor grado.
Las autoridades también lograron determinar respecto al tercer detenido, Adey Fernando García García, oriundo de Cali, Valle del Cauca, que anteriormente fue sindicado por violencia contra servidor público, tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, homicidio, concierto para delinquir agravado, fabricación, tráfico y porte de armas de fuego.
En cuanto a otro de los detenidos, Camilo Andrés Romero Reyes fue procesado por los delitos de receptación, es decir, que se aprovechaba de los efectos de otro hecho delictivo, y en el sistema de la Rama Judicial, al parecer, tiene más procesos pendientes.
El quinto de los capturados y presuntos implicados en el asesinato de Villavicencio es un sujeto identificado como Jules Osmin Castaño Alzate. Este hombre cuenta con antecedentes por violencia intrafamiliar, concierto para delinquir, hurto calificado, tráfico, fabricación y porte de estupefacientes, y hurto de menor cuantía.
Mientras que a Jhon Gregore Rodríguez Góngora, el último de los presuntos implicados, por el momento no le han encontrado antecedentes frente a la ley ni en Colombia ni en Ecuador.
A los colombianos capturados en Ecuador se les adelantará el juicio correspondiente. Los de Haití completarán cuatro años esperando a que los juzguen, mientras padecen condiciones inhumanas en cárceles de Puerto Príncipe, según lo confirman decenas de cartas que han hecho llegar hasta el país.