Horas después de que el embajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti, confesara que este país debería comprarle desde ya gas al territorio bolivariano ante la escasez del hidrocarburo en los próximos siete años, le han caído truenos y centellas.

El presidente de la Asociación Colombiana de Petróleo y Gas (ACP), Francisco Lloreda, fue uno de los gremios que reaccionó. “La propuesta del embajador Armando Benedetti de importar ya gas de Venezuela para almacenarlo es absurda y va en contra del interés nacional. No se entiende el móvil”, dijo.

El gas natural- según Lloreda- es muy costoso de almacenar en su condición gaseosa. “Por eso, se usa de inmediato, se quema en la operación, o licúa (bajando su temperatura a-260 c) para exportar en contenedores especiales”, explicó.

Además, “el gas natural producido en Colombia genera empleos, regalías, impuestos y compra de bienes y servicios en el país. Por eso, teniendo gas natural por desarrollar, no tiene sentido depender del importado”.

Para Lloreda el gas natural importado suele ser más costoso que el nacional. “El importado subiría el costo del gas a 11 millones de hogares y la electricidad (entre el 10-30% de la electricidad se genera con gas natural)”, anunció.

El dirigente reconoció que Venezuela tiene grandes reservas de gas natural, pero su infraestructura de gasoductos está en mal estado y requiere una inversión importante. “Colombia no tiene la de almacenamiento. ¿Lo pagarían los colombianos vía tarifa?”, preguntó.

Destacó además que la declaración del embajador Benedetti “contradice a la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, quien ha precisado que el país debe ser autosuficiente en hidrocarburos; que no debe depender del gas natural de Venezuela o de otro país”.

Cabe resaltar que Armando Benedetti entregó su opinión en una entrevista que concedió a SEMANA, en la que informó sobre su primer balance diplomático, pero no se traduce en una decisión del gobierno de Gustavo Petro, quien hasta ahora ha guardado silencio al tema.

Sin embargo, la opinión del embajador desató una polvareda política que llevó al exsenador de Dignidad, Jorge Robledo, a presentar un derecho de petición al presidente Gustavo Petro en la que le planteó varias preguntas.

“¿Que su embajador en Venezuela promueva importar a Colombia gas de ese país, significa que esa es la política oficial de su gobierno? ¿Usted insiste en que en su gobierno no se buscará más gas -y más petróleo- en Colombia?”, interrogó.

El líder de Dignidad también afirmó “que la incertidumbre causada contra el gas y el petróleo nacional por sus declaraciones como candidato presidencial, por su ministra de Minas, Irene Vélez, y por su embajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti, es muy dañina para Colombia”.

Por último, le reiteró que es deber del presidente “dejar claro que su gobierno promoverá la búsqueda de más gas y petróleo”.