La Comisión de Relaciones Exteriores del Senado dio vía libre a una propuesta que se presentó para que el Congreso colombiano se reúna con los integrantes de la Asamblea Nacional de Venezuela.
La idea es de la senadora del Pacto Histórico Gloria Flórez, quien lideró el tema y presentó una proposición en la Comisión Segunda del Senado para adelantar esa reunión y ayudar en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas y comerciales entre los dos países.
Este es el primer paso que se da en ese sentido porque la plenaria del Senado deberá aprobar la propuesta, aunque se da por descontado que ese trámite se superará porque hay varios congresistas que están de acuerdo con dicho encuentro.
La senadora Flórez indicó que la reunión de los congresos será fundamental para buscar soluciones a los problemas de los habitantes de las zonas fronterizas que han sido afectados por el rompimiento de relaciones entre Colombia y Venezuela.
“Se aprobó un plan para iniciar las conversaciones con la Asamblea Nacional de Venezuela a fin de que podamos construir una agenda común fronteriza y que iniciaría con una reunión en Cúcuta y San Cristóbal. Es una presencia de los dos parlamentos en otros territorios de frontera. Lo que ocurre en el Caribe es muy grave e implica que prestemos atención a esa situación”.
La congresista dijo que el trabajo del Congreso será la de entregar insumos al presidente Gustavo Petro para fortalecer el proceso del restablecimiento de relaciones.
“Queremos escuchar a la ciudadanía para que las relaciones diplomáticas mejoren y participen todos los ciudadanos. Esta propuesta fue presentada y falta definir las fechas”.
La congresista explicó que el encuentro contará con una nutrida presencia de legisladores porque, además de los integrantes de la Comisión Segunda del Senado, otros legisladores han mostrado su interés en participar por pertenecer a departamentos que se han visto afectados con el rompimiento de relaciones.
“Sería una sesión conjunta de los dos parlamentos aunque hay que aclarar que el Gobierno nacional es quien tiene el mandato para el restablecimiento de relaciones, pero nosotros como parlamento buscaremos nutrir esos caminos de diálogo”.
Además de estos encuentros, se hará una audiencia pública en Tibú (Norte de Santander) por la crisis humanitaria que se vive en esa región del país. Así las cosas, es cuestión de horas para que se defina la fecha exacta de esos encuentros que son respaldados por la mayoría de los sectores políticos del Congreso.
Por ahora, nadie de Venezuela se ha pronunciado sobre este tema que se viene abordando desde que Gustavo Petro ganó las elecciones, el pasado 19 de junio. “Debemos oír sus voces, reconocer sus agendas, incidir para que el Gobierno nacional, en conjunto con el Congreso, puedan guiar este nuevo rumbo hacia el desarrollo social, la inclusión, las condiciones de seguridad humana para los habitantes de la frontera y poder enfrentar de manera conjunta desafíos comunes y sobre todo que la economía se vuelva a reactivar, es mucha la promesa que se ha generado por la ruptura de las relaciones”, finalizó Flórez.
Aclaran que la frontera entre Colombia y Venezuela no se abrió el 7 de agosto
Álvaro Leyva Durán, ministro de Relaciones Exteriores para el Gobierno de Gustavo Petro, es quien tendrá la difícil tarea de restablecer las relaciones diplomáticas entre las dos naciones vecinas.
Por tal motivo, en días pasados, Leyva sostuvo un encuentro en el estado Táchira, territorio vecino del departamento de Norte de Santander, allí se reunió con el gobernador Freddy Alirio Bernal en el Palacio de Los Leones de la ciudad de San Cristóbal, sede de la administración.
Según las autoridades, este histórico evento se trató de un “encuentro binacional entre los países hermanos, Colombia y Venezuela”, donde el principal tema fue el restablecimiento comercial hacia Cúcuta que desde hace más de siete años se encuentra restringido.
Así las cosas, el canciller determinó que ante las expectativas que se tienen frente a que la frontera se abriría desde el 7 de agosto, sostuvo que a esa fecha aún no sería posible, pues faltan muchos ejes por tratar para que sea algo positivo y eficaz.
“No, eso no es automático; se tienen que intercambiar embajadores y demás, pero definitivamente se va a hacer. Hay que normalizar las relaciones, son alrededor de 2.200 kilómetros”, aclaró Leyva.
La Cancillería venezolana destacó que, luego de la ruptura de relaciones diplomáticas en 2019, Petro “abrió el canal de diálogo para iniciar el restablecimiento de los vínculos binacionales”.
“Los cancilleres expresaron su voluntad de avanzar en una agenda de trabajo para la normalización gradual de las relaciones binacionales a partir del próximo 7 de agosto, con el nombramiento de embajadores y demás funcionarios diplomáticos y consulares”, recalcó el canciller designado.
Por otro lado, Carlos Faría, canciller de la República Bolivariana de Venezuela, anunció que se acordó el establecimiento inmediato de los embajadores que representarán a ambos países, junto a los equipos de los diferentes consulados.
“Hemos conversado, acordado y estado en coincidencia con el hecho de que debemos ver con cuidado y trabajar en pro de la paz y la seguridad en nuestra frontera. Hablamos de la apertura gradual de la frontera, aspecto que va a beneficiar de manera directa e inmediata a nuestros pueblos”, agregó Faría.