SEMANA revela una imagen del teléfono celular, supuestamente perteneciente a Camilo Bautista, uno de los dueños de la firma Thomas Greg & Sons.
La fotografía le fue enviada al canciller Álvaro Leyva por una persona que dijo tener pruebas contra esa empresa interesada en la millonaria y polémica licitación de los pasaportes.
Allí se observa una conversación, supuestamente entre Bautista y el senador José David Name, del partido de la U. Se alcanza a ver la fecha del 30 de noviembre del 2023.
Name, supuestamente, asegura: “Doctor Camilo, tal cual, y cuente conmigo, haré todo (sic) las gestiones y el lobby que sea necesario para lograr que el señor canciller salga de su cargo, que no debe estar ahí, muchas cosas juegan en su contra”.
El interlocutor, que según la persona que le escribe a Leyva es Bautista, le respondió: “Cuento con ustedes y no se preocupen que aunque mis conexiones en Palacio no se encuentran tan fuertes, tampoco es que estén tan mal. Y yo les ayudo desde esta orilla a ver qué logramos”.
Name le habría replicado: “Eso es un hecho, mi doctor, yo tengo gente trabajando allá en Barranquilla y acá en Bogotá a su servicio y si sus candidatos ganan la contienda espero que ellos estén ahí con nosotros para dar la pelea y sacar a este señor del cargo”. En la imagen del teléfono sobresale la foto de Name y lo que serían dos audios enviados a Bautista.
El interlocutor del canciller durante más de un mes, aproximadamente, aseguró que tenía información comprometedora contra Bautista, y la firma Thomas Greg & Sons.
De esta manera, tendría en su poder múltiples conversaciones de WhatsApp con otros políticos y funcionarios, algunos del Pacto Histórico, que estarían involucrados en una especie de guerra sucia contra el canciller Leyva.
La información nunca le fue entregada al alto funcionario, pese a que él, guiado por Inteligencia, cumplió con una primera exigencia del delincuente, transfiriéndole 30 millones de pesos a una cuenta en Bancolombia, que salieron de gastos reservados.
Pero la persona no solo no entregó la información, sino que empezó a plantearle una extorsión a Leyva, exigiéndole luego otro pago por 50 millones de pesos para no revelar las conversaciones que tuvo con el propio canciller.
El delincuente no contó con que incluso la Fiscalía lo está buscando para capturarlo.
Sobre esta versión que se está investigando, el senador José David Name dijo que es una evidente suplantación y que no conocía del caso hasta que SEMANA hizo la publicación.
“No conozco al señor que se menciona ahí, no he hablado nunca con el canciller y las autoridades deben verificar quién es la persona detrás de esas comunicaciones. Entiendo que ya esto viene siendo investigado por la Fiscalía y todo quedará claro. Estoy sorprendido porque me entero por ustedes, pero no tenía ni idea de esto. Además, ponen una foto y el nombre de uno y eso es lo que hacen los estafadores todos los días”, dijo el senador.
Agregó: “Entiendo que la Fiscalía está siguiendo la pista a un estafador, pero no tengo nada que ver con ese asunto. Hoy en día hay suplantaciones y estafas, eso es lamentable y espero que todo quede claro para no hacerle daño a mi nombre. Pero no conozco al señor, a la empresa, ni he hablado con el canciller”, finalizó.