Andrés Sarabia, el hermano de la directora del Dapre, Laura Sarabia, respondió a los señalamientos sobre la red de tráfico de influencias que ha logrado liderar en el gobierno de Gustavo Petro.
El joven de 25 años es señalado de tener todo un catálogo de conexiones en la Presidencia y en el Congreso, por el que ha accedido a toda una red de beneficios de cuenta de la que pudo mejorar sus capacidades económicas, un cambio en su poder adquisitivo que coincide justo con la llegada de su hermana, una de las mujeres más poderosas del Gobierno, a la Casa de Nariño.
“No tengo, ni he tenido, ninguna red de tráfico de influencias o contratación con el Gobierno”, aseguró Andrés Sarabia en respuesta a un cuestionario de 12 preguntas enviado por SEMANA. El hermano de Laura Sarabia no respondió una a una a las preguntas enviadas por este medio.
No obstante, la denuncia que circula contra Andrés Sarabia indica que este encabeza una red ilegal de contratación pública, tráfico de influencias y sobornos a congresistas que los llevó de ser personas normales a millonarios superpoderosos.
“Soy administrador de empresas y estuve vinculado desde agosto de 2022 hasta mayo de 2023 con la UTL del congresista Santiago Osorio, en la Cámara de Representantes. Durante mi trabajo allí, tuve reuniones sobre temas legislativos con diferentes congresistas, pero jamás me reuní para asuntos ajenos a mis funciones”, agregó en sus respuestas.
Osorio es un representante a la Cámara elegido mediante una coalición que se formó entre el Pacto Histórico y la Alianza Verde, y quien ha sido uno de los congresistas cercanos al Gobierno.
El joven Sarabia trabajaba en una unidad de trabajo legislativo con un salario de 5 millones de pesos, pero su capacidad adquisitiva se incrementó una vez dejó ese trabajo y empezó a trabajar en una empresa de consultoría que fundó con su hermana. Desde entonces, su capacidad adquisitiva mejoró.
“Desde mi retiro de la UTL, brindo asesorías al sector privado y no he tenido reuniones ni he realizado gestión alguna ante entidades o funcionarios del Gobierno”, se defendió Andrés Sarabia.
Andrés Sarabia pasó de tener una vida normal transportándose en un vehículo referencia Renault Logan a tener una empresa a título propio en 2023. Él y su hermana, la directora del Dapre, aparecen como creadores de la compañía ALA Consulting SAS, que se encarga de dar asesorías en asuntos públicos.
Desde entonces se le ha visto trabajar de cerca de Jaime Augusto Ramírez Cobo, coordinador de asuntos legislativos en la Presidencia. Incluso, para quienes trabajan en el Congreso no es extraño verlo entrar a oficinas de los congresistas como la del presidente de la Comisión de Acusaciones de la Cámara, Wadith Manzur.
No obstante, lo que señala el emprendedor es que “la empresa ALA fue creada para atender asesorías exclusivas en el sector privado y nunca ha tenido vinculación o nexos con alguna entidad estatal”.
Con la creación de esa firma la vida de Andrés Sarabia cambió, empezó a mostrar fotografías en sus redes sociales de sus viajes a Europa, ha estado en vuelos en avión privado a conciertos y ha sostenido reuniones con millonarios empresarios.
Una denuncia a la que tuvo acceso SEMANA indica que “los enlaces y la contratación directa que se hace allá cuentan con el visto bueno de los Sarabia, desde ahí se hacen negociaciones con los congresistas”. Es tal el poder al que ha accedido el emprendedor que se comenta que e Andrés Sarabia tiene el “control absoluto de nominaciones, entidades y negocios”.
Este se defiende asegurando que los señalamientos en su contra son “noticias falsas” generadas por cadenas de mensajería. “Considero que este es un simple ataque con noticias falsas y de mala fe, donde se da credibilidad a cadenas de WhatsApp. Protegeré mi honra, mi buen nombre y mi derecho al trabajo”, dijo el administrador de empresas.
Andrés Sarabia cerró sus declaraciones asegurando que es una persona respetuosa de la institucionalidad y reclamando que sus respuestas fueran citadas a cabalidad en el texto. “Así como respeto la institucionalidad, las libertades y los derechos de los demás, confío en que se respeten los míos”, sostuvo, y exigió que “cualquier referencia a mí se haga citando el 100 % de mi respuesta como un entrecomillado y en un solo bloque para evitar cualquier contexto diferente”.
El tráfico de influencias de Andrés Sarabia en el Gobierno fue revelado en el portal Desigual que dirige Alejandro Villanueva. En respuesta a ese escándalo, el joven aseguró que “respecto al señor Alejandro Villanueva, quien reprodujo mentiras e información sin sustento alguno, como él mismo reconoce, la semana entrante presentaré una acción legal por el delito de injurias indirectas”.
Justo tras la publicación del escándalo, Laura Sarabia publicó en su cuenta de X la afirmación de que hay “canalladas que circulan en WhatsApp”.