En una trascendental decisión, el presidente Gustavo Petro anunció la salida de siete de sus ministros. De esta manera, el jefe de Estado planteó lo que será la reestructuración de su Gobierno, nombrando nuevos funcionarios para su gabinete, aunque manteniendo algunos nombres que no dejan de generar polémica.

Por medio de un comunicado, el presidente anunció la salida de los ministros José Antonio Ocampo, Cecilia López, Alfonso Prada, Carolina Corcho, Arturo Luna, Sandra Urrutia y Guillermo Reyes, quienes lideraban las carteras de Hacienda, Agricultura, Interior, Salud, Ciencia, TIC y Transporte, respectivamente.

Según expuso el mandatario, su anterior gabinete fue “rechazado por alguna dirigencia política tradicional y del establecimiento”. El presidente aseguró que seguirán siendo fieles al mandato popular recibido y a su vocación de “grandes acuerdos nacionales”, razones por las que efectuó los cambios.

El presidente Gustavo Petro anunció la salida de siete de sus ministros. | Foto: GUILLERMO TORRES

Una de las salidas más impactantes fue la de José Antonio Ocampo del Ministerio de Hacienda, funcionario que era catalogado como el “bombero” y “adulto en la habitación” en el Gobierno. Su reemplazo será el economista Ricardo Bonilla González, quien viene de ser el presidente de Findeter.

El listado de nuevos ministros se compone de la siguiente manera:

  1. Jhenifer Mojica - reemplaza a Cecilia López en el Ministerio de Agricultura
  1. Ricardo Bonilla González - reemplaza a José Antonio Ocampo en el Ministerio de Hacienda
  1. Luis Fernando Velasco - reemplaza a Alfonso Prada en el Ministerio del Interior.
  1. Guillermo Alfonso Jaramillo - reemplaza a Carolina Corcho en el Ministerio de Salud.
  1. Yesenia Olaya - reemplaza a Arturo Luna en el Ministerio de Ciencias.
  1. Mauricio Lizcano - reemplaza a Sandra Urrutia en el Ministerio de las TIC.
  1. William Camargo - reemplaza a Guillermo Reyes en el Ministerio de Transporte.
José Antonio Ocampo salió del Ministerio de Hacienda. | Foto: GUILLERMO TORRES

“Se van los sensatos”

El remezón ministerial en el Gobierno de Gustavo Petro ha motivado todo tipo de reacciones desde diferentes sectores políticos y sociales. Por ejemplo, una fuerte opinión vino de parte de Esteban Santos, hijo del expresidente Juan Manuel Santos.

“Se van los sensatos y moderados que representaban estabilidad y se quedan los que improvisan y generan incertidumbre”, expresó Esteban Santos en su cuenta de Twitter.

“Pese al mal mensaje que envía el Gobierno, espero que traten de buscar consensos y un diálogo constructivo por el bien del país”, agregó.

Llama la atención que dentro del gabinete de Petro se mantuvieron funcionarios que tiempo atrás han sido objeto de polémica. El caso más representativo es el de la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, quien en el pasado ha protagonizado varias salidas en falso.

Del gabinete original también continúan Néstor Osuna, Iván Velásquez, Susana Muhamad, Catalina Velasco, Germán Umaña y Álvaro Leyva.

Irene Vélez seguirá al frente del Ministerio de Minas y Energía. | Foto: GUILLERMO TORRES

Dos nuevos ministros del Gobierno fueron secretarios en la Alcaldía de Bogotá de Gustavo Petro

Los nuevos nombramientos en el gabinete también causaron polémica teniendo en cuenta que, por ejemplo, Ricardo Bonilla y Guillermo Alfonso Jaramillo, nuevos ministros de Hacienda y Salud, respectivamente, fueron secretarios de gobierno cuando Gustavo Petro fue alcalde de Bogotá, en el período de 2012 a 2015.

Cabe recordar que Ricardo Bonilla ejerció como el secretario de Hacienda de dicho gobierno, es más, el funcionario alcanzó a ser alcalde encargado de la ciudad. Por su parte, Jaramillo estuvo a la cabeza de la Secretaría de Salud.

Tras la experiencia que ambos tuvieron en los cargos durante la administración de Petro en la Alcaldía de Bogotá, el mandatario les encargó esta nueva tarea, donde ambas carteras del Gobierno son muy importantes para el país.

No obstante, por las controversias y la actualidad que vive la reforma a la salud, Guillermo Alfonso Jaramillo es quien ingresa al ministerio con mayores demandas, pues tiene la dura tarea de impulsar la aprobación de la polémica reforma.