La polémica postura del Gobierno nacional del cambio, porque se abstuvo de firmar la resolución de la OEA con la cual se iba a exigir a Nicolás Maduro revelar todas las actas de las mesas de votación en Venezuela, ha provocado ecos que siguen creciendo y generando más críticas.
En ese sentido, Andrés González, exembajador de Colombia en la OEA, arremetió contra esa decisión del Gobierno Petro, señalando que no se compadece con la crisis política que se desató en Venezuela, en medio de las denuncias sobre fraude electoral por parte de Maduro.
“Yo lamento de manera muy, muy sentida que Colombia no hubiese aprobado esa proposición, ese proyecto que estaba a la consideración del Consejo Permanente, porque lo que allí se planteaba es algo en lo cual hay un relativo consenso a nivel internacional y en Colombia, y es que el gobierno venezolano abra el espacio para un escrutinio, para una veeduría internacional con todo el soporte técnico”, indicó en exfuncionario diplomático en diálogo con SEMANA.
También dijo: “Además, con toda la independencia y autonomía para que se pueda esclarecer la situación, porque hay una gran duda sobre el sistema, sobre la manera como fue utilizado, sobre la declaración misma del Consejo Nacional Electoral; esto resulta fundamental para consolidar algo vital en materia política y es: la legitimidad. Y es que sin transparencia no se logra y no se alcanza la legitimidad”.
Y sobre la justificación que dio a conocer la Cancillería, indicó: “Yo he revisado con mucha perplejidad la declaración de la Cancillería porque hay un valor fundamental en el continente, en el mundo, pero especialmente en América, y es que uno de los presupuestos de todos nuestros Estados, todas nuestras naciones, debe ser la guarda de la democracia y el respeto de los derechos humanos”.
“Son los valores fundamentales para la convivencia y para el progreso en la región, y la guarda de la democracia se logra solo sobre la base de una transparencia integral; y lo que hemos advertido es que el hecho de que esté o no esté un país, el presupuesto fundamental es que haya violación de los principios democráticos y de la garantía de los derechos humanos. Una vez se produce ese hecho debe haber una reacción, una acción inmediata de todas las naciones para proteger democracia y derechos humanos”, anotó el exfuncionario.
De la misma manera manifestó: “Esa acción también debe darse, desde luego, a través de los mecanismos multilaterales, es que la OEA es el espacio político en el cual están todos los estados de América del Norte, del Centro, del Sur y del Caribe y, en consecuencia, es el escenario político esencial para poner en marcha estas iniciativas, sin perjuicio de otros esfuerzos diplomáticos que necesariamente se requieren y que van a ser muy útiles”.
“Pero no es válido pretender que porque un país está o no está, no se deba tratar este tema, obviamente lo ideal es que el país esté, pero basta con que haya una grave violación de la democracia para que actúen y se pongan en marcha los instrumentos internacionales y, más aún, en el tema de los derechos humanos. El tema de los derechos humanos para muchas naciones cuando quiera que se pretende actuar para prevenir, para controlar, se dice: ‘no, es que no puede haber injerencia, es que esto se trata de la autodeterminación de los pueblos y de la soberanía de los países’, no”, dijo.
También aseguró: “Yo no podría estar de acuerdo con esa postura porque la guarda y la garantía de los derechos humanos en toda la humanidad suponen una responsabilidad de los Estados. También la tiene Colombia de proceder y de actuar cuando se presente una violación de los derechos humanos; y aquí pues claro, es uno de los derechos fundamentales del pueblo venezolano a decidir sobre su gobierno, sobre su futuro”.
“En el tema de la protección de las personas, de las muertes que vienen ocurriendo, ese debe ser un tema de la agenda y de la preocupación de todos los Estados y de los mandatarios, tanto de Colombia, de América Latina, de Brasil, de México y de todo el continente, en cuanto a la protección de todas las personas en su integridad. El grave riesgo es que aquí muchos ciudadanos y ciudadanas de Venezuela tienen un riesgo alto, tanto en su integridad como en la parte judicial”, anotó.
Por último aseguró: “Ayer hubo un pronunciamiento de la CIDH en cuanto a las garantías, al ejercicio de la protesta y a las garantías de la integridad de las personas. Yo creo que estamos a las puertas de la indispensable intervención de la CIDH para que se produzcan medidas cautelares de protección a un sinnúmero de líderes y de personas que han participado en los últimos eventos en el caso venezolano”.