El exagente interventor del Hospital San Francisco de Asís de Chocó, Carlos Ariel Rodríguez Suárez, aseguró que salió de esa entidad en medio de un “entrampamiento” del ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo.
Rodríguez Suárez había sido designado como agente interventor de la Superintendencia Nacional de Salud para esa IPS en una resolución firmada el 2 de noviembre de 2023 y terminó saliendo de ese cargo a finales de enero de este 2024.
Su retiro se dio justo después de una visita del ministro Jaramillo a ese centro médico en el que el ministro de Salud les recriminó a él y a otros funcionarios del hospital, a gritos, por los avances en la ejecución de recursos dentro de ese centro médico que presta los servicios al departamento.
Los dineros habían sido designados en una resolución de septiembre de 2023, girados para octubre de ese mismo año y para enero de 2024 no se habían ejecutado. Guillermo Alfonso Jaramillo les reprochó por no seguir las indicaciones de una resolución en la que se habían asignado los recursos.
Sin embargo, en conversación con SEMANA, Carlos Ariel Rodríguez Suárez aseguró que los cambios en el esquema de pagos se dieron siguiendo las órdenes que el propio ministro de Salud le había dado en una conversación telefónica, lineamientos que luego el encargado de esa cartera cuestionó durante su visita al hospital.
“Me he sentido engañado, entrampado por el señor ministro y la forma como me sacan del hospital (...) Fui nombrado agente especial interventor del hospital con el fin de administrar, no de liquidar, por parte de la señora Beatriz Gómez Consuegra, quien es la superintendente delegada para las IPS y es la esposa del ministro de Salud. Ella me llamó, conocía mi trabajo y me dijo que viniera a administrar el hospital”, contó Rodríguez Suárez.
El exfuncionario aterrizó en Quibdó el 6 de noviembre de 2023 con el objetivo de poner a marchar ese hospital con problemas de infraestructura, personal de salud y equipos médicos. Allí, como delegado de la Superintendencia de Salud, convocó a un comité de compras para analizar dos resoluciones que ya habían sido expedidas en las que se había detallado la destinación de recursos para la IPS.
Para entonces, se decidió comprar un tomógrafo por adquisición directa al oferente que había presentado el mejor precio en la licitación y se determinó abrir dos convocatorias públicas en Secop II para la inversión de 14.899 millones de pesos para equipos biomédicos que se habían destinado en la Resolución 1473 de septiembre de 2023.
Su versión es: “El ministro me llamó telefónicamente y me dio una orden: me dijo que todo el dinero lo metiera en 12.076 millones y que todo el pasivo laboral de los trabajadores lo metiera en una resolución, me pidió cambiar la base de asignación y pagar lo que sobrara a los proveedores, haciendo una oferta de descuento por pronto pago. Tenía el teléfono en altavoz, estaba en mi oficina con el gerente administrativo y jurídico, y procedí a seguir sus órdenes sobre los pagos de noviembre y diciembre”.
Según Rodríguez Suárez, en ese momento: “Cambiamos la base de asignación de los recursos para cumplir la orden del ministro, pero me entramparon. Caí de una manera vil y vulgar en una trama. Me entramparon y me sacaron de la manera más vergonzosa. Le hice caso a lo que dijo el ministro y después la esposa me saca por esos mismos cambios. ¿A qué estaban jugando? ¿Por qué me sacan de esa manera?”.
Ese monto y los cambios mencionados quedaron constatados en una resolución publicada el 6 de febrero por la Superintendencia de Salud en la que se decidió sacarlo del cargo.
Pero previo a esa fecha, el 27 de enero, Guillermo Alfonso Jaramillo realizó una visita al Hospital San Francisco de Asís de Chocó en la que les reprochó a los funcionarios por no haber abierto las licitaciones correspondientes para contratar los servicios que necesita el hospital, bajo el entendido de que los recursos ya estaban disponibles.
“Ustedes no me escucharon. Dije yo que compraran las lavadoras, compraran las secadoras y pusieran a unas mujeres madres cabeza de familia a operar la lavandería. No me escucharon e hicieron un contrato por un año. Nosotros necesitamos que las cosas se hagan acá, no comenzar a tercerizar todo”, dijo el ministro durante las reuniones que sostuvo con los trabajadores de la IPS, declaraciones que quedaron documentadas en seis videos de su visita a los que tuvo acceso SEMANA.
Por cuenta de esa declaración, el exinterventor acusa al ministro de “decir imprecisiones”. El motivo, según su testimonio: “¿Cómo va a decir imprecisiones de que quiten la tercería de lavandería para poner lavanderas, desconociendo los manuales de bioseguridad? Igualmente, en la alimentación. Es populismo”.
“El ministro increpó sobre por qué no liquidé sobre la primera resolución, pero ¿cómo voy a liquidar sobre la primera resolución si él ordenó cambiarla? Él ordena cambiar la resolución, esconde lo dicho y me hace quedar como malo”, asevera el exfuncionario.
El cruce de declaraciones del ministro de Salud y el exinterventor para el Hospital Departamental San Francisco de Asís terminaron en la salida del cargo de este último.
Durante la visita a la IPS, Guillermo Alfonso Jaramillo había sido enfático en que debían haberse abierto licitaciones para la ejecución de los recursos, pero Carlos Ariel Rodríguez Suárez defiende que los cambios que se aplicaron siguieron las órdenes del ministro de Salud.