En medio de la discusión sobre un posible conflicto de intereses con las empresas chinas interesadas en la construcción de la segunda línea del Metro de Bogotá, el gerente de la Empresa Metro, Leonidas Narváez, les salió al paso a los cuestionamientos o posibles dudas que se están generando en el proyecto y aseguró que la licitación va a continuar.
Narváez puso de presente la solidez jurídica y financiera que tiene la segunda línea del Metro que se va a construir de manera subterránea, entre Suba y Engativá.
“La segunda línea es una licitación pública internacional que se está ejecutando de acuerdo con las normas de la banca multilateral, específicamente el manual de adquisición. La segunda línea está totalmente financiada por el convenio de cofinanciación que firmó el Gobierno distrital, en cabeza de la exalcaldesa Claudia López, y el Gobierno nacional, en cabeza del expresidente Iván Duque. Ese convenio de financiación por 34,9 billones de pesos garantiza las vigencias futuras que van a financiar el proyecto y que aporta recursos hasta el año 2053, 70 % del Gobierno nacional y 30 % del Gobierno distrital”, señaló el gerente.
El funcionario subrayó que para llegar al convenio de cofinanciación Distrito-Nación, se tuvo que tener primero el aval técnico y el aval fiscal.
“El aval técnico asegura por parte del Ministerio de Transporte, que el ente territorial tiene un proyecto con la suficiente madurez para que el Ministerio de Hacienda le aporte los recursos, y el aval fiscal dice que el Ministerio de Hacienda y la Secretaría de Hacienda de Distrital encontraron los recursos necesarios para financiar el proyecto”, dijo Narváez.
Y agregó: “Tanto el aval fiscal, como el aval técnico, como los Confis Distrito Nación, como el Conpes, que establece que el proyecto es de interés nacional y es estratégico, permiten luego que el Distrito y la Nación firmen el convenio de cofinanciación, que le dio luz financiera y soporte financiero al proyecto de la segunda línea del Metro de Bogotá. Y con ese documento fuimos al Concejo y nos aprobaron la capacidad de crédito público y fuimos a la Comisión Interparlamentaria para que garantizaran el aval de la Nación con el cual podíamos acceder a los créditos de la banca multilateral”.
Así mismo, el gerente Narváez explicó cómo se ha venido adelantando la licitación internacional.
“El proceso de licitación de la banca multilateral establece una primera fase de precalificación, es decir, qué grupos de firmas, que se tienen que unir constructores con fabricantes de metro, se pueden unir igual con financiadores y con otras firmas que tienen experiencias y conocimientos específicos, para conformar grupos que permitan generar una competencia y cumplir con los requisitos que se han establecido en los documentos de precalificación”, comentó.
De acuerdo con el funcionario, “los grupos se unen de manera independiente y se evalúa cada grupo de acuerdo con las características de la firma, si cumplen con esas reglas o exigencias de precalificación, tanto de carácter técnico, jurídico, como experiencia financiera, y experiencia en la consecución de créditos para obras de infraestructura”.
Ahora, en cuanto al posible conflicto de intereses que se ha expuesto de manera pública, y el cual SEMANA alertó desde el pasado mes de noviembre, el gerente Narváez acotó que fue uno de los grupos avalados en la precalificación el que alertó sobre esta situación.
“La Empresa Metro de Bogotá y la banca multilateral no estamos incursos en el proceso del conflicto interés, no somos generadores de conflicto de interés, tenemos la responsabilidad de resolver la existencia o no de ese conflicto de interés para que la licitación siga en su trámite con todas las garantías de participación, con transparencia en el manejo de la información, con equilibrio para que todas las firmas presenten una propuesta y nos permita seleccionar la propuesta más favorable para la ciudad de Bogotá”, manifestó.
En todo caso, el gerente Narváez subrayó que “la decisión nuestra y de la banca es que se continúa con la licitación, no se ha suspendido, no hay ningún banco que se haya retirado, no hay riesgos de ningún recurso de Nación o Distrito. Aquí no hay pagos, no estamos utilizando ningún tipo de recursos. Es más, tomamos una determinación el año pasado de no adquirir todavía predios”.