Colombia está en riesgo de que se agraven los incendios forestales en el país, especialmente en las zonas de la Amazonía y el Pacífico, regiones a las que se trasladarán los puntos de calor durante el mes de febrero, según los pronósticos ambientales.
Por ese motivo, el presidente Gustavo Petro anunció una cooperación internacional especial enfocada en la prevención de una catástrofe natural en esas partes del país, que incluye una alianza con Brasil para controlar las emergencias que puedan presentarse en la selva y el apoyo de varios actores globales, para proteger nuestros bosques.
De ahí que el presidente Petro hablará esta semana con su par Lula da Silva para establecer un plan de acción que permita evitar ese tipo de emergencias en los bosques, así como ya se confirmó la cooperación de Canadá, Perú, Estados Unidos, México y la Unión Europea para esta crítica situación ambiental.
En ese sentido, la cooperación Sur - Sur con Perú es determinante porque ese país ya envió la ayuda técnica necesaria para activar el avión Hércules de la Fuerza Aérea, que es el más capacitado para contener los incendios forestales. Los ingenieros peruanos ya llegaron al territorio colombiano para respaldar al Estado en esta contingencia.
“El problema mayor, según los pronósticos que tenemos, los puntos de calor en Colombia, que se han extendido a casi todo el país Andino y caribeño, tendrán unos desplazamientos. En el mes de febrero, en el litoral Pacífico y en el Amazonas entran en el mapa de puntos de calor mucho más altos que en el historial del país y se reducen un poco en la región central hacia Norte de Santander”, alertó el jefe de Estado.
Esto significa que geografías como Antioquia, el Caribe, el litoral Pacífico y la Amazonía se cubrirán de calor durante ese periodo. “En estos dos últimos puntos cualquier fuego tiene unas dimensiones completamente diferentes a lo que hemos visto hasta ahora. No son fuegos de montaña, no se pueden atender por tierra en general. Pueden ser fuegos que se extienden en la selva de una manera que aún no se ha escrito en Colombia”, llamó la atención el presidente Petro.
El Gobierno activó protocolos para pedir cooperación internacional que permita ampliar las capacidades aéreas para cuidar la selva amazónica y el litoral Pacífico. Asimismo, la Cancillería puso en marcha protocolos internacionales con Naciones Unidas y Estados aliados para cumplir con ese objetivo.
La meta, en palabras del mandatario, es que “estemos todos listos para atender lo que podría ser una emergencia planetaria: la selva amazónica. Mañana hablaremos con el presidente Lula de Brasil, vamos a activar el componente amazónico, los países que tienen soberanía sobre el Amazonas para construir, ojalá con ayuda de todos, un Puesto de Mando Unificado a nivel amazónico que hoy se considera puede ser el punto de mayor peligrosidad no solo para Colombia, sino para América Latina y, sobre todo, para la humanidad”.
Contención de los incendios
“En el incendio forestal se necesitan dos componentes, la acción aérea y la acción terrestre. La acción terrestre está en manos de bomberos municipales en distintos puntos del país con ayuda de la Fuerza Pública nacional, para que tengan un balance de nuestras capacidades frente a los puntos de incendio, se han utilizado 3.800 personas entre bomberos municipales, Defensa Civil y Fuerza Pública en general”, detalló el presidente Petro.
A renglón seguido, puntualizó que “la capacidad que tenemos en todo el país es de 20.800 personas. De ellas, 11.000 personas tienen capacidades de especialidad. Es decir: nuestro personal en todo el país está disponible en un número muchísimo mayor que lo que hasta ahora hemos utilizado en los incendios”.
Desde que comenzó la emergencia por incendios forestales en Colombia se han apagado 443 conflagraciones, de las que 29 fueron controladas entre viernes y sábado (las últimas 24 horas desde que el mandatario hizo el anuncio).
Para controlar esos puntos de calor se han utilizado 30 aeronaves que han lanzado 700 descargas de agua. Además, el Gobierno reportó que hay 117 municipios en una situación de estrés hídrico, lo que significa que están necesitando asistencia para mantener el equilibrio entre la demanda y la oferta de agua potable. En esos lugares habrá 1.100 carrotanques repartiendo agua.