El Gobierno de Gustavo Petro se alista para una maratónica semana en el Congreso de la República. Este viernes 20 de octubre vence el plazo para que se tramite el presupuesto general de la nación para el 2024 y, si no se logra abordar el estudio legislativo de ese articulado para ese mismo día, el presidente Petro podría avalarlo por decreto.
La fecha límite la pone la propia Constitución y la Casa de Nariño tenía muy claro ese plazo, pero entre las discusiones de las reformas, el ausentismo en el hemiciclo por las elecciones regionales del próximo 29 de octubre y el proceso previo de análisis que adelantaron las comisiones económicas con el Ministerio de Hacienda, el estudio de las plenarias del Senado y la Cámara de Representantes quedó contra reloj.
Mejor dicho: todo indica que el presupuesto general de la nación solo va a tener dos días de análisis del Congreso en pleno (martes y miércoles) porque el resto de días los parlamentarios no han estado sesionando por la temporada electoral.
Varios congresistas le dijeron a SEMANA que el proyecto de ley sí se va a aprobar esta misma semana y que no será necesario que sea proclamado por decreto presidencial de Gustavo Petro. Es más, los independientes y de oposición aseguran que no quieren permitir que el presidente Petro tenga la oportunidad de auto aprobar el texto de esa forma y por eso van a intentar dar la pelea, aunque saben que será una tarea difícil.
Es más, tienen claro que va a ser un análisis a pupitrazo y aprobados artículos por paquete, tal y como está sucediendo con la reforma a la salud porque el tiempo, simplemente, no les va a alcanzar para dar el debate que les gustaría.
Desde la oposición se quejan de que el Gobierno “no quería cambiar nada” y tuvo un debate “muy cerrado” en las reuniones que llevaron a cabo los legisladores interesados en el tema con el Ministerio de Hacienda. Es más, solo los ponentes han tenido tiempo de estudiar el documento en detalle.
“Solo los ponentes han tenido tiempo de estudiar a profundidad el presupuesto. Habrá poco tiempo para que la plenaria conozca cada rubro y, por supuesto, para que se debata a profundidad, especialmente la ejecución presupuestal en donde el Gobierno se ha rejado con creces. Desafortunadamente, el debate del presupuesto va a ser superficial y no se abordarán los temas de fondo”, llamó la atención el senador del Centro Democrático, Miguel Uribe Turbay.
El senador del Pacto Histórico, Alberto Benavides, defendió el articulado señalando que este busca cumplir con el Plan de Nacional de Desarrollo actual en ejes “transformadores claves”, entre los que nombra la seguridad humana y la justicia social, aspectos para los que trazan una inversión importante en salud, educación e infraestructura.
“Aumentar la productividad agropecuaria y las bases de reforma agraria, duplicando el presupuesto hasta los 9 billones de pesos; la restauración de ecosistemas claves para afirmar ordenamiento territorial alrededor del agua, así como al derecho humano a la alimentación y contribuyendo a generar un nuevo modelo de desarrollo hacia la convergencia regional, en donde están programas estratégicos que contribuyan a cerrar brechas de desigualdad y oportunidades regionales”, detalló el senador Benavides.
No obstante, congresistas como Uribe Turbay han asegurado que con ese proyecto de presupuesto Colombia podría romper la regla fiscal y quedar en default, un riesgo sobre el que el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ya intentó dar un parte de tranquilidad.
El senador del Centro Democrático, Ciro Ramírez, alertó sobre que en el presupuesto para los recursos para VIS faltan 450 mil millones de pesos en fondos y llamó la atención acerca de que para el sector salud se necesitan recursos del orden de los 10 billones de pesos. Eso, sin que se tenga en cuenta lo que costaría la reforma a la salud que está en trámite en el Congreso, pendiente de su segundo debate en la Cámara de Representantes.
Ya los números del presupuesto general de la nación para 2024 están sobre la mesa y el Gobierno Petro volverá a poner a prueba sus cargas en el Congreso para tramitarlo. Los números parecen estar a su favor.