Gustavo Bolívar les respondió a quienes lo critican por su defensa de la primera línea, no solo desde su labor cuando senador, proponiendo que se les permitiera a los jóvenes detenidos salir de prisión para ser gestores de paz, sino durante el paro nacional de 2021, participando en una colecta realizada en la plataforma Vaki para abastecerlos de elementos de protección, como cascos, gafas y guantes.
El excongresista, que no descartó la posibilidad de aspirar a la Alcaldía de Bogotá en las elecciones regionales que se llevarán a cabo el domingo 29 de octubre, afirmó que si bien algunos políticos buscan descalificarlo por su defensa a la primera línea, él se siente orgulloso.
“La derecha trata de desprestigiarme con la primera línea como si me avergonzara haber dotado de elementos de protección a jóvenes que estaban siendo masacrados y mutilados. Se equivocan. Me siento muy orgulloso de haberlo hecho y lo volvería a hacer mil veces. Juventud heroica viva”, escribió en su cuenta Bolívar, que oficializó su paso al costado en el Senado el pasado 31 de diciembre, para apostar por proyectos personales como escribir una novela para RCN.
Valga recordar que el pasado 17 de enero, la Corte Suprema de Justicia trasladó el caso de Gustavo Bolívar por presunto financiamiento de la primera línea a la Fiscalía General de la Nación, dado que como renunció a su cargo como senador, el alto tribunal perdió competencia.
“Por razones de competencia se ordena remitir la actuación, en el estado de que se encuentre, al despacho del fiscal general de la Nación, para que adopte las determinaciones que sean del caso, de conformidad con lo previsto en los artículos 251, numeral 1, 325 numeral 5 y parágrafo de la Constitución Política, modificados por los artículos 1 del Acto Legislativo número 6 de 2011 y el 3 del Acto Legislativo número 1 de 2018″, se lee en el oficio emitido por la Corte Suprema.
“En virtud de lo expuesto, la conclusión que necesariamente se impone en el presente caso es que la Corte ha perdido competencia para continuar con el trámite de la investigación adelantada contra el excongresista Gustavo Bolívar Moreno, que a la fecha, en virtud de su renuncia, ha cesado en el ejercicio de sus funciones en el Senado de la República”, añade el documento.
Quien denunció al exsenador, por supuestamente “armar a la población civil para atacar a la Fuerza Pública”, fue el jurista Víctor Mosquera, quien tiempo atrás conversó con SEMANA sobre el tema.
En su momento, el abogado de Bolívar, Miguel Ángel del Río, afirmó que él solo “pretendía comprar elementos de protección porque, cuando él hace la Vaki, había jóvenes que salían a proteger a otros de los embates de la Fuerza Pública, específicamente del Esmad, y ya se tenían probados varios casos de agresiones. Esa fue la motivación”.
Miguel Uribe, molesto con Bolívar
Desde que Gustavo Bolívar denunció trata de mujeres en el Congreso de la República, en entrevista con SEMANA, algunos lo han acusado por no haber puesto la situación en conocimiento de las autoridades, aunque el exsenador argumenta que lo hace por no traicionar a las víctimas que confiaron en él para contarle lo ocurrido.
El 20 de enero, el senador Miguel Uribe Turbay, uno de los opositores del Gobierno de Gustavo Petro, trinó: “Bolívar es patético. Tira la piedra y esconde la mano. Dice que tiene nombres de victimarios, pero guarda silencio. Guardó el secreto y protegió la identidad de los criminales durante años. Fue aliado político de los mismos que hoy ‘denuncia’. Bolívar parece más un cómplice”.
Las denuncias que recibió el exsenador dejan ver la manera como opera esa red al interior del Capitolio. “Para poderlas esclavizar sexualmente, les hacían contratos de dos o tres meses. Es más fácil para que vuelvan a estar con ellos que si los contratos se los hacen por un año. Las mantienen así, con contraticos chiquitos Esa fue la denuncia que me hicieron ellas”, dijo Bolívar.