Una de las promesas de campaña que aún no ha podido materializar el presidente Gustavo Petro ha sido la reducción en las tarifas de energía, cobro que se ha convertido en el dolor de cabeza de los ciudadanos en varias regiones del país.
En medio de ese panorama que golpea al bolsillo, el mandatario colombiano, dio a conocer que su gobierno dio lo que sería el primer paso para bajar las tarifas de energía.
“Es apenas el primer paso para reducir las tarifas de energía eléctrica en Colombia y el Caribe”, posteó Petro.
La reacción del jefe de Estado fue a un anuncio que hizo la Superintendencia de Servicios: “Cumpliendo la orden del Gobierno nacional y del presidente @petrogustavo, la Superintendencia de Servicios Públicos anuncia que esta medida preliminar forma parte de un proyecto de ley que permitirá la devolución de saldos, beneficiando a los estratos. Con ello, reafirmamos el compromiso del gobierno con las comunidades más vulnerables y seguimos trabajando por la #JusticiaTarifaria”.
“Desde la SuperServicios estamos implementando los tres principios constitucionales para las tarifas: garantizar la compra de energía a precios justos, eliminar sobrecostos e intermediarios, y asegurar condiciones de igualdad y solidaridad tarifaria. Además, hemos adoptado otras medidas técnicas para reducir las facturas de energía”, dijo la entidad.
“No nos olvidamos de los departamentos de Cesar, Bolívar, Sucre y Córdoba, donde próximamente se implementarán soluciones adicionales para seguir disminuyendo las tarifas. Este es el verdadero #GobiernoDelCambio”, detalló la Superintendencia de Servicios.
Cabe señalar, que mientras los técnicos en el área de Minas y Energía se muestran preocupados por la presión que los abultados números en las facturas de la luz, principalmente en la región Caribe están haciendo en los bolsillos de los colombianos, el Ministerio de Minas confirma que habrá nuevas empresas que se sumarán a las siete que ya acogieron iniciativas para reducir las tarifas del servicio público domiciliario.
En la Región Caribe, en particular, el hecho de que a los ciudadanos les estén cobrando deudas atrasadas, como la de la opción tarifaria, más el costo de las llamadas pérdidas negras —que son nada más ni nada menos que la energía que se roban los inescrupulosos—, ha llevado a un apretón que hace que los colombianos de esa zona del país hayan salido a denunciar que: o comen o pagan la luz.
El panorama no ha sido fácil para que el presidente Gustavo Petro cumpla la promesa de bajar las tarifas de la energía. Por un lado, todo el efecto del fenómeno del Niño, que encareció aún más la energía, se sumó a los elementos mencionados (opción tarifaria y cobros más allá de lo consumido).