Gustavo Petro ha usado por años el balcón como la más poderosa arma de comunicación política, pero quizás el más esperado ha sido el de este primero de mayo. En medio del sacudón que produjo el remezón ministerial y tras una semana en que el presidente estuvo cargado de tigre contra todo y contra todos, el discurso del Día de los Trabajadores, día en el que había llamado a la gente a las calles, producía mucha expectativa. Al final, pasó lo que se esperaba: Gustavo Petro llamó al pueblo a levantarse, anticipó escenarios -para muchos- catastróficos y habló de revolución.
El presidente Petro comenzó hablando de Alfonso López Pumarejo y de la persecución que el líder liberal vivió en ese momento por querer transformar al país. Vaticinó que ese bloqueo de las élites al cambio genera magnicidios. “El terror sobre el pueblo campesino fue creciendo hasta que asesinaron a una de las personas que quería desarrollar eso que se llamó la revolución en marcha: Jorge Eliécer Gaitán”.
En un país polarizado, lo que dijo aterró a muchos sobre el futuro inmediato que le espera a Colombia y llenó a otros de ilusión. Estas son sus frases más impactantes.
Vea el video con el discurso del presidente
1. “Hoy puedo tener la seguridad, miren esta paradoja, que si no se aprueba la ley de reforma a la salud, si no se aprueba la ley de reforma a las pensiones, las EPS se acaban, y los fondos privados de pensiones también”
El presidente se despachó por la reforma a la salud. “No porque el presidente quiera, sino porque lo que estamos diciendo alrededor de un modelo ideológico ha llegado a su final en todo el mundo. Y mantenerlo sólo trae catástrofe y derrota. Si el Congreso no apoya las reformas, las EPS morirán como un dominó, saliendo definitivamente del mercado, como un dominó que se cae, ficha tras ficha. Eran 110, no quedan sino seis vivas. Estamos sosteniendo a la mayoría de las actuales, artificialmente, tratando de darle un tiempo de reflexión al Congreso de la República”, agregó el presidente.
“Pero si no hay ley, esas EPS quebrarán y sus afiliados irán a las que sobrevivan y ese número de afiliados, que son ya siete millones, hará que se derrumben las que quedan. El mundo de las EPS ya no tiene sentido. Lo que estamos proponiendo es una reforma a la salud ordenada, un cambio de funciones, una priorización diferente. Si ese cambio ordenado no es posible, por la codicia del corto plazo, entonces habrá un cambio desordenado y es la quiebra permanente y continua del sistema de EPS en Colombia”, dijo el presidente.
2. No es sino que no se apruebe el proyecto de ley y verán cómo en el corto plazo los fondos de pensiones quiebran
Petro señaló: “Y así sucederá con los fondos privados de pensiones, ya no dan ahorro, sus gastos en el año son mayores que sus ingresos, ya no hay capacidad de ahorro, por tanto, el negocio dejó de existir. Las utilidades y comisiones de los fondos van hacia abajo. Millones de personas se han pasado de los fondos privados de pensiones a Colpensiones, y ese traspaso de millones de personas, en la última década, no en mi gobierno, va mostrando el punto final de ese régimen. El mercado tampoco pudo garantizar el derecho a la pensión en Colombia. No es sino que no se apruebe el proyecto de ley y verán cómo en el corto plazo los fondos de pensiones quiebran. En una circunstancia tan desordenada que van a poner en peligro las pocas posibilidades de pensión del pueblo trabajador de Colombia. Lo que hemos propuesto garantiza la pensión”.
3. “La tierra es para el que la trabaja, no es para un grupo de herederos de los feudales y esclavistas”
“La tierra es para el que la trabaja”, dijo este lunes festivo, primero de mayo, el presidente Gustavo Petro, desde el balcón de la Casa de Nariño. “Tiene una función social, una función ambiental, la tierra no es para un grupo de herederos de los feudales y los esclavistas que la tienen por tenerla, como si fuera un símbolo del poder, que la defienden matando al humilde, contratando ejércitos privados y que no cumplen la función social de ponerla a trabajar para que se cultiven los alimentos que un pueblo hambriento hoy necesita a como dé lugar”, agregó Petro, quien invitó a los campesinos a levantarse.
“El pedir unos criterios de mayor dignificación del trabajo no son un absurdo, tiene que ver con construir una sociedad más igualitaria, más justa, y una sociedad más justa es más pacifica, es más democrática, es más productiva”, agregó.
4. “Tenemos una sociedad que no es libre”
“La mayoría de la población no es ni lo uno ni lo otro, está excluida. Pareciera entonces que no tiene libertad, pero si vamos al concepto, la libertad consiste en superar las necesidades fundamentales del ser humano. Una persona es más libre entre más satisfaga sus necesidades fundamentales. Si la mayoría no puede satisfacer las necesidades básicas, entonces tenemos una sociedad que no es libre porque la libertad consiste en superar esas necesidades”, añadió el jefe de Estado.
“Nosotros hemos tratado de cumplir esa directriz del pueblo, que se expresó en las urnas, que supo entender que era el momento dejar la barricada para ir por millones a las urnas porque allí era donde verdaderamente se podía cambiar la historia de Colombia”, afirmó.
5. “Estamos en un momento similar al del general Melo, al del presidente Bolívar, al del gran reformador Alfonso López Pumarejo”
El primer mandatario dedicó, además, un espacio a Simón Bolívar. “Quizá pensaron, Petro en la Presidencia tiene tantos obstáculos internos, adentro del Gobierno, externos, frente al Congreso, las Cortes y los principios de la independencia de las ramas que pueden acorralar a Petro en su intención de hacer reformas. Pues hoy, me parece que sin repetir la historia porque la historia nunca se repite, estamos en un momento similar al del general Melo, al del presidente Bolívar, al del gran reformador Alfonso López Pumarejo”, precisó.
“Que vamos a vivir circunstancias y situaciones similares, creían que Petro acorralado bajaría la idea de la gran transformación, bajaría la ideal del cambio social, que simplemente se acomodaría para vivir tranquilo un hecho definitivo de su vida, el hecho de ser el primer presidente de izquierda de Colombia y que no molestaría más, que se iría tranquilo a vivir de su pensión, repitiendo de nuevo un gobierno más de los mismos”, dijo.
Gustavo Petro hizo hincapié en la historia colombiana y el duro momento por el que atraviesa la nación. Afirmó que va a seguir trabajando en las reformas y le dijo al pueblo que no puede bajar las manos.
“No basta con ganar en las urnas, el cambio social implica una lucha permanente y la lucha permanente se da con un pueblo movilizado y al frente de ese pueblo tiene que estar la juventud, el pueblo trabajador, la clase obrera. El intento de coartar las reformas puede llevar a una revolución”, insistió el mandatario.
6. Gaviria es un vocero de los “dueños de los bancos, los dueños del capital”
El primer mandatario aseguró que la reforma a la salud sobrevive, a pesar del liberalismo y especialmente de su líder, el expresidente Cesar Gaviria, a quien le mandó uno de los más duros varillazos de la jornada. “Solo porque los dueños de los bancos, los dueños del capital, presionaron a uno de sus mayores voceros, el expresidente Gaviria, para tratar de oponer al Partido Liberal que se había afirmado a sí mismo como el partido del pueblo allá en la convención del teatro Colón, dirigida por Eliécer Gaitán, que había salido a luchar, incluso a riesgo de sus vidas, para que no se detuviera a sangre y fuego la revolución en marcha que acompañó a Gaitán hasta el final, que acompañó a López Pumarejo, ese pueblo liberal fue traicionado de nuevo ahora, cuando decidieron que iban a votar en contra de la reforma social, de la posibilidad del cambio”.
Agregó que “esa reforma estuvo a punto de ser derrotada. La salvó un voto. Los liberales de la comisión, excepto la congresista antioqueña (María Eugenia Lopera), después de que se habían comprometido a luchar conjuntamente por las reformas sociales de Colombia, después de que incluso nos habían ayudado a conseguir que las poblaciones llegaran a las urnas para la gran victoria popular, se echaron para atrás”.
7. “Qué mentirosas las frases aquellas que repiten una y otra vez los medios de comunicación”
Para el presidente, los medios de comunicación han sido opositores del cambio. “Qué mentirosas las frases aquellas que repiten una y otra vez los medios de comunicación, diciéndole al pueblo que tenemos uno de los mejores sistemas de salud del mundo, qué gran mentira, qué manera de engañar, hasta la misma revista científica de enorme calidad reconocida en el planeta, la revista Lancet, buscando precisamente los indicadores que miden cuánta gente ha muerto, si se podía salvar, si hubiera llegado el tratamiento a tiempo, nos coloca en el puesto 81″, aseguró el mandatario.
“A pesar del bloqueo, Cuba está en una mejor posición porque la colocan en el puesto 55 y a los norteamericanos, que deberían estar en los primeros lugares, los colocan en el puesto 29, demostrando que por mucho dinero que se invierta en negocios privados el derecho a la salud no se consigue con eficacia”, agregó.
8. “Nuestra sociedad colombiana no tiene libertad, lo que escribieron en el escudo no es una verdad”
El presidente Petro criticó incluso el escudo de Colombia. Aseguró que teniendo en cuenta una definición más filosófica, debe ser revisada para que no sea malentendida. “Si vamos al concepto la libertad, que una persona es más libre entre más satisfaga sus necesidades fundamentales. Si tenemos una sociedad donde la mayoría del pueblo no puede satisfacer sus necesidades básicas entonces tenemos una sociedad que no es libre”. Por eso, aseguró: “Nuestra sociedad colombiana no tiene libertad, lo que escribieron en el escudo no es una verdad”.
Haciendo énfasis constante en el discurso de la diferencia de clases y la brecha de ingresos, el jefe de Estado aseguró que el concepto de libertad ha cambiado muchísimo y hoy por hoy no se puede hablar que Colombia sea libre: “Tenemos una sociedad donde la mayoría del pueblo por la injusticia social, por el desequilibrio entre la sociedad, no puede suplir sus necesidades básicas, entonces tenemos una sociedad que no es libre (...). La posibilidad de dar espacio libre no es posible si no se tiene lleno el estómago, si hay carencia, si hay una preocupación permanente por el ‘de qué voy a vivir’ el día de mañana si no se está asegurada la comida”.