El presidente Gustavo Petro defendió una vez más la terna que presentó a la Corte Suprema de Justicia para la escogencia del nuevo fiscal general, que reemplazará después de febrero de 2024 a Francisco Barbosa.
Lo hizo este viernes 3 de agosto, desde Sincelejo, y horas después de conocer uno de los escándalos más delicados contra él y su gobierno: su hijo, Nicolás Petro, le confirmó a la Fiscalía que en la campaña de su padre ingresaron dineros irregulares que no fueron reportados en las cuentas a las autoridades, entre ellas al Consejo Nacional Electoral.
Lo hizo, en medio de la audiencia de legalización de su captura por parte de la Fiscalía que lo investiga por los delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
“La terna que he presentado –en mi opinión–, la Corte ya decidirá, no es para esconder el delito. Soy el primer presidente que le dice a la justicia que juzgue a su hijo. Y no porque otros hijos no hayan delinquido, porque sabemos que sí, sino porque todos los presidentes protegían al hijo antes que a la justicia”, manifestó.
Petro confesó “que a mí me costará muchísimo, pero quiero proteger primero a la justicia porque sé que protegiendo a la justicia protegeré a millones de hijos e hijas del pueblo colombiano que no irán asesinados por ahí”.
Las tres penalistas ternadas son Ángela María Buitrago, Amparo Cerón y Amelia Pérez.
Desde el momento de la postulación, el presidente ha tenido que defender sus nombres ante la opinión pública.
Por medio de su cuenta de Twitter, el jefe de Estado resaltó que las tres mujeres que tienen su voto de confianza defendieron los derechos humanos en la peor época del “genocidio desatado en Colombia”.
“He escogido tres mujeres con profunda experiencia en el derecho penal y en el ejercicio de su vida profesional como fiscales para integrar la terna para designación de fiscal general de la Nación”, trinó Petro.
Y agregó en el mensaje: “Las tres tienen un común denominador: todas arriesgaron su vida por defender los derechos de los seres humanos en el peor momento del genocidio desatado en Colombia”.
Desde Sincelejo en Sucre, el presidente de la República no dejó pasar por alto el terremoto político y judicial que se desató en el país por los graves señalamientos que afirmó su hijo Nicolás Petro ante la Fiscalía General de la Nación, sobre una presunta financiación ilegal de su campaña presidencial al parecer con dineros sucios.
En su agitado discurso, el mandatario colombiano fue enfático en advertir que no le ha dado la orden a ningún integrante de su familia, hijo o hija, de delinquir o autorizar procedimientos ilícitos a su campaña para llegar al poder.
“Por la tarde tuvimos otras noticias, que no puedo expresar a profundidad, un presidente debe tener información un poco más precisa, algunas cosas sí podemos decir. Algunos periodistas quieren una entrevista, pero quiero hablar con mi pueblo, fue mi pueblo el que me eligió, a nadie más le debo la elección, entonces es al pueblo que debo responder”, sostuvo Petro.
Y agregó: “Tengan la certeza que este Gobierno se acaba de acuerdo al mandato popular, de nadie más, y es bueno que eso quede claro en Colombia. No hay nadie que pueda terminar con el Gobierno, que el pueblo mismo, el cual dio una orden, nos vamos hasta el año 2026, cualquier idea en contrario ojalá se esfume rápidamente, invito a personas que tienen otras ideas que paren, el pueblo se respeta, punto”.