Avanza la COP16 en Cali, considerado por los expertos ambientalistas como uno de los más importantes eventos internacionales sobre la protección de la biodiversidad, en el cual se están definiendo las estrategias para implementar medidas sobre la crisis climática para las próximas décadas.
Ese encuentro ha desatado también una fuerte expectativa, sobre todo por la participación de las delegaciones internacionales, hecho que le puede dar más peso y trascendencia.
Frente a ese punto en particular, el primer mandatario, Gustavo Petro, lanzó una particular declaración, que deja mal parado a uno de los más cercanos aliados en la región.
En ese sentido, el jefe de Estado reveló que el presidente del país vecino, Luiz Inácio Lula da Silva, no lo acompañó en la COP16, situación que puso de presente en un evento de alto nivel que se desarrolló en Bogotá sobre la Organización de Estados Americanos (OEA).
“Como propuesta. Ustedes mencionan el cambio climático, indudablemente es un tema que tenemos que discutir, que es del mundo, es de Colombia. En este momento se está realizando la COP16 en Cali. Dice el New York Times que es la más importante en la historia de biodiversidad. Se han reunido los pueblos, los gobernantes no fueron, ¿cierto? Ni siquiera Lula me acompañó, pero bueno. Vamos a ver, pero realmente se han reunido los pueblos”, anotó el presidente Gustavo Petro.
El mandatario colombiano estuvo presente el pasado 20 de octubre en la apertura de la COP16 en Cali, desde donde dio un discurso en el que aseguró que Colombia estaba en el centro del mundo debido a la importancia del evento internacional.
Sin embargo, el lunes de esta semana, en la inauguración de la Zona Verde, bautizada como el corazón de la COP16, el jefe de Estado arremetió con dureza contra ese tipo de reuniones multilaterales.
“Gobiernos que se reúnen una y otra vez, se reúnen aquí, es decir, se han reunido 16 veces antes para hablar de biodiversidad. Y se reúnen en las otras COP del clima, que ya va para la 30, es decir, se han reunido 29 veces en diferentes lugares del mundo. Se han reunido los gobiernos del mundo para platicar del clima y del qué hacer. Problema: nos hemos quedado platicando”, sostuvo Petro en esa oportunidad.
Pero las críticas de Petro no pararon ahí, ya que también dijo desde el atril en ese día: “Hay dos tiempos diferentes completamente, yo diría contradictorios. La sensación amarga de salir de cada conferencia de las partes sin que haya salido nada concreto o a veces a medio hacer, o con declaraciones que después al mes siguiente no se cumplen. Y no se cumplen porque los países más poderosos simplemente no tienen la voluntad de cumplir”.
Y terminó con otro sablazo sobre los recursos para afrontar de manera contundente la crisis climática: “A veces solo se acerca con una especie de vasija para pedir una limosna, como si con limosnas pudiéramos solucionar el principal problema de la humanidad en este momento, el problema del clima y el problema de la desaparición de las especies vivas sobre el planeta Tierra, incluida la especie humana, fracaso tras fracaso durante 30 años”.