Aunque el grueso de expresidentes de Colombia tienen claro que el gobierno de Gustavo Petro debería endurecer su posición contra el régimen de Nicolás Maduro, señalado de robarse las elecciones del 28 de julio, en la Casa de Nariño mantendrán la posición de diálogo.
Tras sostener dos comisiones de relaciones exteriores, la última este martes 27 de agosto, en la que participó el presidente Petro, el ministro de Relaciones Exteriores, Luis Gilberto Murillo, confirmó que en el marco de ese encuentro, “Colombia se mantiene como un país que tiende puentes y que puede generar facilitación y mediación para soluciones de fondo en Venezuela. Y que sean soluciones que partan del diálogo y de la negociación política con los mismos venezolanos y venezolanas”.
Es decir, el Gobierno Petro mantendrá la posición que ha sostenido desde el 28 de julio pasado, cuando el Consejo Nacional Electoral de Venezuela proclamó a Nicolás Maduro como presidente y no reveló las actas que confirmaran o desmintieran el supuesto triunfo en las urnas.
Petro no le copió al grueso de expresidentes que le pidieron endurecer la posición contra Nicolás Maduro, entre ellos, Álvaro Uribe, Iván Duque, César Gaviria y Andrés Pastrana, quienes no asistieron a la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores porque tenían claro que más allá de lo que opinaran, el presidente Petro adoptaría un papel de negociación con Maduro.
De hecho, el expresidente Juan Manuel Santos, quien esta semana demostró que está cerca de Petro, insistió en la necesidad de que el líder venezolano salga del Palacio de Miraflores. “Es lo que más le conviene a Colombia”, aseguró.
“Nicolás Maduro perdió toda legitimidad, los hechos son contundentes y tiene que salir (del poder). Y ojalá salga sin violencia, de la mejor forma posible para los intereses venezolanos y los colombianos. Colombia tiene muchos intereses que están ligados a Venezuela. Por eso, el presidente Gustavo Petro también ha querido mediar esa salida. Ojalá tenga algún éxito en forzar una negociación que la oposición ha dicho que está dispuesta a entablar, una negociación para buscar una salida de Maduro”.
No obstante, “esa posibilidad se está volviendo cada vez más difícil. Y, en esa medida, el gobierno de Colombia, Brasil y el mundo entero tienen que endurecer su posición para buscar la solución que a todos les conviene, que es el retorno de la democracia”, dijo Santos.
Petro mantendrá el diálogo con Nicolás Maduro porque no quiere conflictos en el vecindario y, además, el líder venezolano se ha convertido en una ficha clave para consolidar los diálogos entre los grupos armados y el Gobierno nacional.
Maduro, por ejemplo, fue clave a la hora de consolidar el proceso de paz con la guerrilla de las Farc y Juan Manuel Santos y en el Gobierno Petro ha sido fundamental para sentar al ELN cada vez que el grupo armado muestra su rebeldía en la mesa de conversación.
Actualmente, tras la crisis que enfrenta la mesa de diálogo y ese grupo armado, Nicolás Maduro podría ser clave para enrutar la negociación. Sin embargo, anda ocupado en sostenerse en el Palacio de Miraflores.