El pasado martes 19 de septiembre, a las 8:00 p. m., por cerca de 25 minutos, el presidente Gustavo Petro volvió a interrumpir el horario prime time de la televisión colombiana, que emite programas como MasterChef Celebrity y Yo me llamo, para retransmitir su discurso de la mañana ante la Asamblea General de las Naciones Unidas.
En lo que va de su administración, Gustavo Petro ha emitido doce alocuciones, de las cuales sólo cuatro han sido pronunciamientos importantes dirigidos a la ciudadanía. Las demás son transmisiones o retransmisiones de discursos de otra índole, sin un propósito específico.
En nueve meses de 2023, van diez alocuciones y la última emitida es la segunda del mes de septiembre, ya que la anterior fue el jueves 14.
Esto evidencia que al presidente le gusta cada vez más el horario prime time de la televisión, que asegura que sus discursos sean vistos por millones de colombianos, así estos no lo quieran.
Por esa razón, los televidentes, cansados de las constantes interrupciones, se quejaron en redes sociales por no poder disfrutar de sus programas en los horarios habituales.
“¡Qué despropósito esta alocución presidencial!”, dijo un internauta en X en la noche del martes.
“Otra alocución del presidente justo cuando va a empezar MasterChef… Petro, basta ya”, publicó una usuaria de la red social.
Otros muestran con memes lo que sienten cuando su programa favorito es interrumpido por el presidente.
“Mi cara cuando veo que hay una nueva alocución presidencial”, dice una de las publicaciones humorísticas.
Otra tuitera expresó su opinión: “¿Otra vez una alocución? Qué pereza... ¡Cambio de canal ya!”.
A lo largo del discurso, los comentarios no cesaron: “Otra vez a la hora de MasterChef, hermano. No lo dejan a uno aprender a cocinar”.
La oposición no puede replicar tantas alocuciones
Petro, según la Ley 182 de 1995, se encuentra en derecho de utilizar como guste ciertas franjas de la televisión.
“El presidente de la República podrá utilizar, para dirigirse al país, los servicios de televisión, en cualquier momento y sin ninguna limitación”, se lee en la norma.
Sin embargo, la preocupación de la oposición radica en que el mandatario emite discursos de más de 40 minutos en prime time’ e televisión nacional, mientras los colombianos esperan por ver los programas más vistos del momento. De esta forma, se estaría utilizando el espacio para asuntos intrascendentales.
“Es una forma por lo menos atípica en la comunicación de la Presidencia de la República. El país estaba acostumbrado a que las alocuciones se utilizaran de una manera excepcional, por unos motivos de suma importancia y de una manera inclusive breve, de siete a once minutos. Además, tenían poca frecuencia. Era para cosas excepcionales”, expone Hernán Cadavid, representante a la Cámara del Centro Democrático, en conversación con SEMANA.
Según Cadavid, es en primer lugar un “abuso” de la franja y una técnica “invasiva” del presidente, dado que obliga a muchos colombianos a ver sus discursos extensos, frecuentemente dirigidos a su electorado o simpatizantes.
“Es invasivo porque no está entregando un mensaje concreto al país. Está sometiendo al país y a los televidentes a ver sus discursos, que parecen es de campaña política y no de decisiones del Gobierno”, agregó el congresista.
La invasión de la franja horaria no es la única preocupación de Cadavid. El congresista afirma que toda la oposición, conformada principalmente por los partidos Centro Democrático y Cambio Radical, se encuentra inconforme con la cantidad de réplicas que les permite el Estatuto de la Oposición.
De acuerdo con esta norma, el derecho de la oposición a responder a lo dicho por el mandatario en las alocuciones tiene un límite de tres por año, contado desde el 7 de agosto, cuando se posesionó el presidente.
Desde el pasado 7 de agosto, la oposición respondió a dos alocuciones del presidente Gustavo Petro, con las mismas garantías, tiempo y franja televisiva. Ahora no pueden responder a la última alocución, porque solo les queda una oportunidad hasta agosto de 2024.
“A nosotros como oposición nos queda una sola réplica hasta el 6 de agosto de 2024. Las otras se han utilizado. Ahí va a empezar a presentarse un desequilibrio”, manifestó el parlamentario.