Esta semana inició en firme la recolección de firmas para el cabildo abierto del corredor verde por la carrera séptima, con el propósito de que la alcaldesa le responda a la ciudadanía sobre el proyecto. Así lo dio a conocer el concejal del Polo Democrático, Carlos Carrillo.

Cerca de 30.000 firmas válidas deben completarse para que el cabildo abierto sea una realidad. El concejal Carlos Carrillo, junto a los activistas Edmundo López, Katherine Garavito y ciudadanos representantes de las asociaciones Corpochicó, Archi y Asoretiro, lidera la recolección de firmas y hacen un llamado a los ciudadanos para que apoyen la iniciativa.

La recolección se está llevando a cabo todos los días a lo largo de la Carrera Séptima. Los ciudadanos interesados están recogiendo firmas por su propia cuenta, con sus propias planillas, que son recolectadas y entregadas en cinco puntos distintos de la carrera séptima.

Corredor verde de la carrera séptima

Dentro de los parámetros que se deben tener en cuenta son: firmar con nombres completos, cédula y firma. Así mismo, recomiendan no salirse de la casilla por cada firma, con el propósito de prevenir que sea anulado el apoyo.

Recientemente, en diálogo con SEMANA, el concejal Carrillo explicó varios de los reparos que tiene con el proyecto promovido por la alcaldesa López.

“Se elimina el tráfico mixto, es decir, las motos, los taxis, las rutas escolares, las ambulancias, los carros de valores, y todo se trata de una irresponsabilidad absoluta y lo que pasa es que Claudia López toma un dogma de Enrique Peñalosa y es que en la lucha por el espacio en superficie en la ciudad hay una lucha de clases y todo se puede reducir a una simplicidad grotesca de que los ricos andan ocupando el espacio en sus carros lujosos, mientras que los pobres van en los buses, pero eso es mentira porque el transporte público en Bogotá no ha parado de perder pasajeros en los últimos 20 años y esa gente ha recurrido al carro, a la moto y a la bicicleta”, señaló Carrillo.

Concejal Carlos Carrillo | Foto: Concejo de Bogotá

El concejal del Polo Democrático señala que el gran objetivo de este corredor verde de la carrera Séptima es el de bajar a las personas del carro particular para que se monten al servicio público, pero visualiza que eso no va a pasar y que el proyecto sería un fracaso total en esta materia, además del caos vial que generaría.

En su momento, frente a estos cuestionamientos de un posible caos en la movilidad con la eliminación del tráfico mixto de la Séptima en el sentido norte – sur, el director del IDU Diego Sánchez, respondió a SEMANA: “en ningún caso el proyecto va a impedir que quien tenga un acceso sobre la Séptima en el costado occidental en el sentido norte centro se quede sin acceso, todos los predios van a tener acceso”.

Y agregó: “no va a haber un carril continuo que se tome en la calle 92 y lo lleve hasta la 34, lo que va a haber es un carril, pero para entrar a los predios, entonces si alguien quiere dirigirse hacia el centro, por eso le estamos habilitando mejores condiciones en el borde oriental, se trata de obras que no se habrían hecho nunca si no se hace el corredor de la Séptima”.

Es de mencionar que pese a los cuestionamientos que ha recibido, la alcaldesa Claudia López presentó a mediados de marzo los diseños del Corredor Verde de la Carrera Séptima y dio todos los detalles en cuanto a la proyección y la obra pública.

Para la ejecución del Corredor Verde de la carrera Séptima se requieren 419 predios, de los cuales 304 son objeto de adquisición y 115 corresponden a cesiones hechas al Distrito. | Foto: Alcaldía de Bogotá

Según la alcaldesa, el objetivo es transformar el espacio público existente con más zonas verdes que ayuden a mejorar la movilidad sostenible desde todos los frentes: transporte público, transporte de vehículos particulares, ciclistas y peatones en la zona nororiental de la capital.

Los tres tramos serán distribuidos de la siguiente manera: el primero va desde la calle 26 hasta la calle 32; el segundo, de la calle 32A hasta la 93A y el tercero de la 93A a la calle 200.

"Se recibieron más de 50.000 propuestas que fueron tenidas en cuenta para llegar a los diseños finales", aseguró el documento emitido por la Alcaldía | Foto: Alcaldía de Bogotá

Se construirá el deprimido de la calle 100 y en la calle 92 un puente de dos carriles que permitirá el paso hacia la avenida circunvalar sin semáforos pasado de 40 a 10 minutos de trayecto.

El costo estimado del proyecto rodea los 2,5 billones de pesos que incluyen la interventoría, la obra y los costos de mantenimiento durante cinco años después de haber iniciado la operación.