Avanza, en el palacio presidencial, una reunión de alto nivel entre el presidente Gustavo Petro y el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, en la que se discutirán medidas para afrontar la aguda crisis de agua por la que atraviesa la ciudad.
Una de las opciones que se esta barajando en el distrito es declarar la emergencia, situación que será analizada con el Gobierno nacional y los funcionarios expertos en la materia.
En la reunión también participa el director de la CAR, Alfred Ballesteros, quien tiene varias propuestas, las cuales permitirían superar la difícil situación por la que está atravesando la capital del país.
Una de las propuestas está encaminada a aprovechar el agua lluvia y el agua de pozos subterráneos, además de comprar predios en páramos para su protección.
Cabe recordar que el alcalde mayor de Bogotá, Carlos Fernando Galán, se reunió el martes, 8 de octubre, en el Palacio de Liévano, con el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Carlos Carrillo, para evaluar las crisis por el abastecimiento de agua en la capital del país.
En ese encuentro, el mandatario distrital y el funcionario del Gobierno nacional exploraron alternativas de abastecimiento para hacerle frente a la sequía que ha afectado el nivel de los embalses en la ciudad.
Al término de la reunión, el director Carrillo reveló que una de las posibilidades que se puso sobre la mesa, y se va a estudiar en los próximos días, es una eventual declaratoria de emergencia.
“Tuvimos una reunión con el alcalde Carlos Fernando Galán y con algunos miembros de su equipo. En esta reunión abordamos bastantes temas, pero particularmente hubo un énfasis en el posible desabastecimiento de agua en un futuro próximo para Bogotá. Esto es una preocupación del Gobierno nacional y por supuesto también del Gobierno distrital”, dijo el director de la entidad.
En ese sentido, Carrillo agregó: “Dentro del marco del respeto por la autonomía del Gobierno distrital, planteamos diferentes escenarios de cooperación entre el Gobierno nacional y el distrital. También seguiremos trabajando para definir si habrá o no una declaratoria de emergencia o cuáles pueden ser los mecanismos que el Gobierno nacional emplee para cooperar en la atención en este problema que hoy afecta a los bogotanos”.
A su turno, el alcalde Galán también entregó sus conclusiones luego del encuentro con el director de la UNGRD, Carlos Carrillo.
“Bogotá está lista para trabajar junto a la nación para enfrentar emergencias y solucionar los retos en el suministro de agua en la ciudad. Hoy estuvimos reunidos con Carlos Carrillo, director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, y con su equipo, con quienes conversamos sobre las medidas adoptadas por Bogotá para solucionar la situación del suministro de agua en el mediano y largo plazo”, expresó.
Y añadió el mandatario distrital: “Les presentamos las obras que hemos adelantado en la planta de Tibitoc, que nos han permitido incrementar su capacidad de tratamiento, pasando de 4,6 m3/seg a cerca de 8 m3/seg, para así aliviar la presión sobre el Sistema Chingaza. Igualmente, acordamos trabajar de la mano para analizar de manera técnica la posibilidad y los plazos para aprovechar aguas lluvias en la ciudad, así como para actualizar los estudios que nos permitan determinar la situación real de agua subterránea en Bogotá y revisar si es una posible solución a mediano o largo plazo”.
En entrevista con SEMANA, el alcalde Galán ya había indicado que desde la Alcaldía están dispuestos a evaluar la posibilidad de establecer esa declaratoria de emergencia.
“Estamos listos a sentarnos con el presidente y con el Gobierno a contarles por qué hemos tomado las decisiones que hemos tomado, qué elementos nos han llevado a tomarlas, qué resultados tenemos de eso, para ver cómo se puede complementar y cómo eventualmente una emergencia podría acompañar o apoyar esas medidas”, indicó Galán a este medio.
El mandatario distrital finalmente agregó: “Nosotros estamos convencidos de que las medidas que hemos tomado son las acertadas, son difíciles, obviamente, son las de corto plazo, no son las que solucionan de fondo el problema en lo que tiene que ver con el racionamiento, tenemos que tomar otras medidas como las de la planta Tibitoc y tiene que haber una discusión también sobre una cosa que menciona el presidente y es cada vez utilizar más las aguas lluvias”.