El fuerte cruce de palabras entre el presidente, Gustavo Petro, y alias Iván Mordisco, jefe del Estado Mayor Central (EMC) de las disidencias de las Farc, han generado varias reacciones ante la situación que vive el país, tras los ataques perpetrados por el grupo insurgente en el Cauca que llevaron a suspender el cese al fuego.
Debido a este rifirrafe, el exministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, reaccionó en su cuenta de X a la publicación de Mordisco al señalar que eso es “otra confirmación de elección irregular, sin legitimidad, con apoyo de todo tipo de criminales”.
“Las Cortes dirán si hay quiebre del orden constitucional”, manifestó Pinzón al indicar que las “consecuencias son nefastas: economía desacelerada, inversión cae, criminales en expansión salida de capitales, crece inmigración”.
Mordisco atacó a Petro, en un mensaje publicado en la red social de X en la que le dijo: “cuando lo apoyamos en campaña no éramos traquetos”, debido a las últimas declaraciones del jefe de Estado desde el municipio de Tierralta, en donde lanzó un ultimátum contra las disidencias, alertando que si toman el camino de “Pablo Escobar” el Estado los enfrentará.
“El camino de Pablo Escobar no es el mismo camino del sacerdote Camilo Torres Restrepo, uno va para un lado y el otro va para el otro, el de Pablo va para asesinar la gente y morir y el del cura Camilo Torres va para servir al pueblo y ayudar a la vida”, sostuvo Petro.
Ante esto, Mordisco respondió: “Presidente Gustavo Petro me acusa de traqueto y de usar la memoria de Manuel Marulanda. Cuando lo apoyamos en campaña no éramos traquetos”.
En el mensaje publicado en una cuenta de X, la máxima cabeza del EMC agregó: “Además de traicionarnos, traicionó al pueblo que lo respaldó por su discurso progresista y de paz, hoy impulsa la guerra y el capitalismo”.
Los señalamientos de parte y parte se dieron luego de que en los últimos días, las disidencias de Iván Mordisco desataron una ola de violencia en el departamento de Cauca, situación que ha dejado como principales afectados a las comunidades indígenas, que han hecho un insistente llamado para que los crímenes paren.
La dirigente indígena Carmelina Yule fue una de las víctimas mortales que dejó uno de los más recientes ataques del EMC en el municipio de Toribío, Cauca. La mujer murió el pasado domingo, 17 de marzo, en un centro médico de la ciudad de Cali, donde se encontraba internada recuperándose de las lesiones.