Una cita secreta entre la hoy candidata a la Alcaldía de Cali Diana Rojas y el polémico exgobernador del Valle del Cauca Juan Carlos Abadía, destituido e inhabilitado por 10 años para ejercer cargos públicos, promete sacudir la campaña regional en la capital vallecaucana. Hasta ahora, Rojas se ha presentado como una candidata independiente ante la opinión pública y los medios de comunicación.
En un primer momento, tras ser contactada por SEMANA, Rojas negó haberse reunido con Abadía. “No, no me reuní con él. Me buscó pero yo no tengo nada que hablar con ese ladrón. Él y el hermano de Jorge Iván (Ospina) se robaron Emcali”, dijo Rojas en un mensaje por escrito a un periodista de este medio.
Sin embargo, casi una hora después, ante las evidencias, la candidata a la Alcaldía se comunicó con el reportero y dio otra versión de los hechos. Aceptó que, efectivamente, se reunió con Abadía, en el 2022, en una cita que fue propiciada por a quien en la conversación se refirió como su “jefe”: el político y empresario Maurice Armitage, quien está impulsando su candidatura.
A pesar de las posiciones públicas de Rojas contra Abadía, y de calificarlo como un “ladrón”, sí se reunió con él. El encuentro, de hecho, se dio en la sede de Sidoc, la empresa de Armitage. Según su relato, Armitage la citó a ella a su oficina y, según dijo, nunca le informó previamente que en el lugar iba a estar Abadía. “Él (Abadía) buscó a Maurice y le dijo que quería un puente para reunirse conmigo. Entonces, Maurice me dijo: ‘nos vemos’. Cuando llegué, Abadía ya estaba ahí”, contó Rojas. “Le debí haber tirado la puerta”, sostuvo la candidata a la Alcaldía de Cali. Pero no lo hizo, y la reunión se realizó. Rojas aceptó: “A vos te llama tu jefe, y te dice ve, nos vemos en la oficina, y vos vas”.
Allí, según fuentes conocedoras de ese encuentro, Armitage y Rojas estarían buscando el apoyo político de Abadía para la candidatura de la exconcejal a la Alcaldía de Cali. Rojas niega esta versión y dice: “La reunión no duró nada, Abadía quería que yo no le tirara más, y yo le dije que no, que debía seguir haciendo mi trabajo”.
La misma fuente le dijo a SEMANA que, después de esa cita secreta, tanto Abadía como Rojas habrían conversado telefónicamente. La candidata le habría insistido en el apoyo para su campaña, pero Abadía se habría negado porque, según le dijo, ya tenía otros compromisos políticos. Rojas dice que nunca le ha pedido apoyo a Abadía.
Lo que la candidata sí reconoce, pese a que se ofrece como una alternativa independiente en la campaña, es que tiene jefe: el político y empresario Maurice Armitage. Es claro que él fue jefe de Rojas en la Alcaldía de Cali, ya que ella se desempeñó como su secretaria privada. Varios años después, Rojas se sigue refiriendo a Armitage como su “jefe”.
Abadía es uno de los políticos más cuestionados del Valle del Cauca y ha protagonizado escándalos de repercusión nacional. Fue destituido e inhabilitado por la Procuraduría por participar en política cuando era gobernador, al convocar a los alcaldes del departamento a una reunión con el entonces precandidato presidencial Andrés Felipe Arias. En 2022, Abadía fue imputado por cohecho por dar y ofrecer por estar involucrado, presuntamente, en el ‘Cartel de la Toga’.
Los cuestionamientos con respecto a Rojas sobre su incoherencia no terminan ahí. SEMANA ha encontrado una puerta giratoria entre el exrepresentante a la Cámara Juan Fernando Reyes Kuri, del Partido Liberal, a quien Rojas se refiere como un “viejo amigo”, políticos de Palmira, la fundación Somos Juntos, contratos en esa ciudad del Valle del Cauca y la financiación de todo tipo de campañas. Entre ellas, la de Carlos Fernando Motoa, un senador que es considerado un barón electoral de Cambio Radical, y la del propio Reyes Kuri.