La reforma política promete convertirse en la manzana de la discordia del gobierno de Gustavo Petro y el Congreso en el 2023. Este jueves 15 de diciembre, la congresista de la Alianza Verde Catherine Juvinao se fue lanza en ristre contra la iniciativa en medio de la conciliación que adelanta la Cámara.

O al menos mostró su molestia con algunos artículos del proyecto que terminaron incluidos a última hora en la iniciativa. “Qué barbaridad. La reforma política asegurándoles la curul a los actuales congresistas. Si eso no es el más claro conflicto de interés, no sé qué será”, escribió en su cuenta personal de Twitter.

A renglón seguido, envió un anuncio: “Demandaremos varios artículos de la reforma ante la Corte Constitucional, incluyendo la burda y descarada puerta giratoria”, dijo.

Es decir, el artículo que les permite a los congresistas convertirse en ministros, una iniciativa que, según algunos líderes del Centro Democrático, tiene nombre propio: Roy Barreras. Al menos, habilitaría, eventualmente, al Presidente del Senado a convertirse en Embajador de Portugal desde mediados de 2023, como se ha venido especulando. Hay que recordar que él le dijo a SEMANA que renunciaría a su cargo tras los quebrantos de salud generados por el cáncer.

Juvinao también está molesta porque, según ella, el Congreso legisló en causa propia. “Advierto: estamos incurriendo en un claro conflicto de interés al votar conciliación para asegurar nuestros puestos en las listas cerradas de 2026. Vendrán múltiples demandas de pérdida de investidura que promoveremos los mismos congresistas que nos oponemos a esta aberración”, afirmó.

Citó un parágrafo transitorio N.2 del proyecto donde se lee: “Para el período de transición del nuevo sistema de democratización interna para la selección de candidatos que integrarán las listas cerradas y bloqueadas de los partidos y movimientos políticos con personería jurídica, al que se refiere el presente artículo, se utilizarán los diferentes mecanismos establecidos en el Artículo 107 y en la Ley. Para la organización de estas listas, por única vez, se podrá tener en cuenta el orden de la elección, sin condicionamiento de género, del último período constitucional, para la respectiva corporación”. En otras palabras se priorizarán a los actuales congresistas.

Es más, Juvinao confirmó que presentó impedimento para votar la conciliación de la reforma política “por legislar en causa propia. Es inconcebible que el Congreso quiera legislar para sí mismo de forma tan descarada. Vendrán demandas de pérdidas de investidura y la primera que las impulsará seré yo”, advirtió.

No es la primera vez que Juvinao hace críticas a la reforma política. Desde el comienzo del período legislativo, ella dejó claro que no estaba de acuerdo con cerrar las listas en las elecciones a corporaciones públicas, al menos mientras no existieran mecanismos democráticos internos claros que garanticen un verdadero ejercicio igualitario.

A ella, por ejemplo, le preocupa que las listas cerradas promuevan la dictadura del bolígrafo de los directivos de los partidos y sacrifiquen verdaderos liderazgos. La Alianza Verde, el partido por el que llegó al Senado Juvinao, participó en las elecciones del 13 de marzo pasado con listas abiertas donde ganaron los candidatos que más votos obtuvieron en las urnas.