Luego de las declaraciones del exsenador Gustavo Bolívar en una entrevista en exclusiva con SEMANA, en la cual afirmó que dentro del Congreso de la República varias mujeres fueron a su oficina a denunciar la presencia de una presunta red de favores sexuales a cambio de contratos; la Corte Suprema lo citó para ampliar su declaración.

La citación la efectuó la Sala de Instrucción de la Corte Suprema y será ante el magistrado Marco Antonio Rueda Soto, quien es el presidente de esa sala. La citación se llevará a cabo el próximo jueves 18 de enero. Además, Bolívar también fue notificado para acudir a la Fiscalía General de la Nación y la Procuraduría General de la Nación, para hablar sobre el mismo tema y entregar la información sobre el caso, del cual sostuvo en la entrevista con SEMANA que tiene pruebas.

Gustavo Bolívar fue congresista durante más de cuatro años, desde el 20 de julio de 2018 hasta 31 de diciembre de 2022. (Photo by Juancho Torres/Anadolu Agency via Getty Images) | Foto: 2019 Anadolu Agency

Como las denuncias implican la participación de funcionarios del órgano legislativo (en este caso, el Congreso), la Sala de Instrucción de la Corte Suprema cumple la función de investigar al detalle las labores de congresistas, ministros, gobernadores y generales. Luego de tener la información correspondiente, es la sala encargada de decidir si acusa formalmente al funcionario ante la Sala Especial de Primera Estancia. La Sala de Instrucción existe desde una reforma sancionada en el 2018.

Bolívar sostuvo en SEMANA que tiene las pruebas suficientes para acusar a ciertos legisladores. Sin embargo, no reveló nombres, a pesar de que en redes sociales varios políticos y usuarios le han solicitado que los exponga con la opinión pública. Bolívar solo ha pedido paciencia, dado que dirá los nombres con las autoridades competentes.

El exsenador Gustavo Bolívar se despachó contra sus compañeros políticos en entrevista con SEMANA. | Foto: Mario Inti -SEMANA

Por ejemplo, el congresista del Centro Democrático y miembro de la Comisión Ética de la Cámara de representantes, Juan Espinal, afirmó en sus redes sociales que Bolívar debe mostrar las pruebas de lo que afirmó: “Bolívar debe mostrar pruebas de sus denuncias, de lo contrario sería un chisme o una narconovela que lo único que logra es dañar la imagen del Congreso”.

Las citaciones con la Fiscalía y Procuraduría se llevarán a cabo de forma virtual, debido a que Bolívar se encuentra al exterior del país. “Si quien hace las leyes de un país le quita parte del sueldo a sus asesores, contrata chicas a cambio de favores sexuales, financia su campaña con dinero sucio, favorece con sus votos a los poderosos, ese país no puede ser otra cosa que un país atrasado, violento, corrupto, desigual”, indicó el exsenador a través de sus redes sociales.

Gustavo Bolívar ha acudido a las citaciones de forma remota, debido a que se encuentra afuera del país. Foto Mario Inti Garcia Mutis | Foto: Revista Semana

Durante una entrevista con SEMANA, el pasado 7 de enero, Gustavo Bolívar afirmó que al interior del Congreso hay hace bastante tiempo una red que hacía que las mujeres fueran esclavizadas sexualmente por los parlamentarios. “Uno empieza a ver que hay muchas niñas bonitas en diferentes ramas. Estoy contándole denuncias que me hicieron ellas en mi oficina. Mi secretaria está de testigo. Ella fue la que me dijo que había unas niñas que querían hablar conmigo. Yo le dije: claro, las escucho”, indicó el excongresista.

Adicionalmente, recalcó que los casos no han salido a la luz los cuatro casos que conoce, debido a que las implicadas están temerosas para denunciar, debido a que no saben que pueda ocasionar y lo que lleguen a pensar sus respectivos maridos y novios. Bolívar calificó esta situación como un abuso bárbaro contra las mujeres.

Por último, comentó que le daba rabia ver a los congresistas relacionados con estas denuncias en los pasillos del Capitolio. Además, manifestó que nunca estuvo interesado en nadie, debido a que consideró que al más mínimo intento de cortejar, podría haber una cámara y eso llevaría a malinterpretaciones e inconvenientes. “Parecía un caballito, ni las miraba”, sostuvo.