El exembajador de Colombia en Estados Unidos Francisco Santos lanzó este martes 20 de septiembre una fuerte advertencia ante las invasiones ilegales que se están generando en 18 departamentos del país. “La guerra civil que se está creando y el renacer del paramilitarismo tienen dos nombres y apellidos: Gustavo Petro e Iván Vélasquez”, dijo.
Para Santos, “no proteger al ciudadano lleva a eso. ¿Lo hacen a propósito?”.
La reacción del exvicepresidente, quien cree que el gobierno de Gustavo Petro quiere crear condiciones de caos para radicalizar su agenda, se dio tras conocer las declaraciones de líderes afros que actualmente protagonizan una confrontación por tierras en el Cauca contra los indígenas. “De aquí nos sacan muertos, de ninguna manera nos dejaremos de los indígenas”, concluyó un grupo de agros consultados por SEMANA.
Francisco Santos está preocupado por la guerra civil que se podría desatar entre los poseedores ilegales de tierras y los propietarios, quienes no están dispuestos a dejarse quitar sus predios, una situación que, en este caso, está a punto de estallar en el Cauca, donde diariamente se libran varios enfrentamientos entre civiles.
Las alarmas ante las confrontaciones que se podrían avecinar cada vez son más recurrentes. El senador del Centro Democrático Alirio Barrera le dijo recientemente a SEMANA “que Dios permita que la invasión de tierras no termine en una guerra civil”.
A su declaración se ha sumado la del expresidente Álvaro Uribe, el fin de semana pasado en Quindío. “No se ejerce autoridad y tarde que temprano aparece la justicia privada y es peor”, manifestó.
“Nosotros aceptamos que el presidente Petro tiene que resolver problemas campesinos, tiene que adquirir unas tierras, tiene que resolver unos problemas de vivienda, ya hay unas tierras de extinción de dominio y tiene que comprar otras”, agregó.
Entonces, “¿qué pedimos? Que eso no afecte la propiedad privada y no estimule el camino de la violencia, que es el camino de la invasión. Que hay que comprar 500.000, 600.000 mil hectáreas para el sector campesino, que las compren, pero que pongan mucho cuidado porque, si se les va la mano y abren una oficina de compra de tierras y el país está asustado, les ofrecen todas las tierras del país y se las venden”, interrogó.
Aunque el gobernador de Magdalena, Carlos Caicedo, denunció que “la esencia paramilitar sale a flote en el ideario de Álvaro Uribe y sus declaraciones”, el Centro Democrático respondió que el mandatario “de forma irresponsable tergiversa la posición del [ex]presidente frente a las invasiones. Contrario a lo que expone, hemos pedido ejercicio de autoridad para prevenir justicia privada, la cual desencadenaría más violencia”.
Más allá de las diferencias en los conceptos, los ganaderos no están dispuestos a dejarse quitar las tierras. Al menos, en grupos solidarios se han unido para actuar en masa, pero pacíficamente y prevenir que foráneos las invadan sus predios productivos.