En medio de una nueva jornada de los diálogos vinculantes que convocó el presidente de la República, Gustavo Petro, la vicepresidenta Francia Márquez lideró la reunión en Buenaventura, en el departamento del Valle del Cauca, y desde esa región la alta funcionaria del Gobierno nacional lanzó varias pullas a los medios de comunicación.
En su discurso, visiblemente molesta, señaló que lo que sale en medios de comunicación es, según ella, la desinformación diciendo que se la pasa haciendo fiestas y no la construcción de paz que se está logrando en Buenaventura con la conformación de un ambiente de tranquilidad.
“Esta noticia, no es una noticia que sale en los medios de comunicación convencional, en los medios lo que sale es la desinformación diciendo que me la paso haciendo fiestas”, sostuvo Márquez.
Y agregó: “Pero la información diciendo que aquí en Buenaventura se construye la paz y es que se ha logrado que dos actores armados se colocan de acuerdo y se dispongan para la paz total, eso es una noticia muy importante para el país”.
“Noticia que no sale en los medios, pero que sabemos lo que hemos vivido el conflicto armado y la violencia, los que nos toca mantener en medio del miedo de la zozobra que significa devolverle la tranquilidad al municipio de Buenaventura”, subrayó la vicepresidenta.
Sin embargo, la vicepresidenta Francia Márquez negó el jueves de esta semana en la noche que hubiera estado en la fiesta de celebración de su posesión y que fue denunciada el pasado fin de semana, con documentos, y aseguró que ella no tenía facultades para ordenar gasto.
La vicepresidenta afirmó en Noticias RCN que “no hay ninguna fiesta, o si hubo una fiesta, yo me la perdí, porque no estuve en la fiesta”, y aseguró que “el Gobierno que está saliendo es el que organiza la posesión”.
“No creo que a las 3:00 de la tarde que yo me posesioné… a las 6:00 de la tarde hubiera tenido facultades para ordenar el gasto y decidir cuántos recursos se gastaban en eso”, afirmó Márquez, quien agregó que “toca preguntar” quien fue el que ordenó ese gasto, “pero eso no lo definí yo”.
Las pruebas de la fiesta
Pese a lo dicho por la vicepresidenta, lo cierto es que existen documentos que evidencian que la celebración se llevó a cabo y que su costo superó los 52 millones de pesos.
Las pruebas de la fiesta fueron reveladas el pasado fin de semana por el abogado especialista en derecho público Daniel Briceño en redes sociales y desataron un escándalo en el país que se sumó a otros gastos elevados en los que ha incurrido en gobierno del presidente Gustavo Petro.
Según la denuncia, para celebrar la posesión presidencial de Gustavo Petro y su vicepresidenta Francia Márquez, el pasado 7 de agosto, se llevó a cabo una fiesta privada en la que hubo presencia de DJ, costosas bebidas, chef privado, entre otras excentricidades que fueron sacadas del bolsillo de los colombianos.
De acuerdo con los contratos de las empresas prestadoras de los servicios de catering, dados a conocer por Briceño el pasado lunes 17 de octubre en la tarde, la fiesta de la vicepresidenta inicialmente había sido presupuestada en $38.868.951.
Sin embargo, al final, por exceder el número de asistentes planeados, terminó costando $52.453.705.
Uno de los momentos más esperados de la fiesta de posesión fue la comida, que estuvo a cargo del reconocido chef de comida del Pacífico, Rey Guerrero, quien además es muy cercano a Francia Márquez, y fue el encargado de todas las elaboraciones gastronómicas del evento. Entre esas no faltó lo típico de esa región: pinchos de langostino, rollos de carne de jaiba ahumada, empanadas de camarón, entre otros. Al chef le pagaron la suma de $23.024.000.
De los eventos previos a la posesión, el primero fue el 6 de agosto, cuando el entonces presidente Iván Duque recibió a unas 100 personas de las delegaciones internacionales que asistieron a la posesión de Petro y el cual costó en total $15.600.000.
Luego fue un almuerzo protocolario de despedida de Iván Duque, su gabinete y la cúpula militar en el que estuvieron unas 100 personas y que en total costó $11.670.000.
Luego, el tercer evento fue para celebrar la posesión de Petro, donde hubo presencia de 500 invitados. Allí la comida fue hasta para tirar para el cielo, con música, DJ y decoraciones, todo por un costo de $68.570.000.
Algo que ha llamado la atención fueron los gastos para decorar con flores la Casa de Nariño, por un valor de $28.060.200.
Lo peor es que este nuevo escándalo se suma al de los gastos de la Presidencia de más de 173 millones de pesos en electrodomésticos, muebles, colchones y otros artículos para la casa de ambos servidores y que se denunció a principios de octubre. Entre los artículos que llamaron la atención estuvieron los tres televisores por un valor de $38 millones.