El expresidente Álvaro Uribe volvió a criticar la polémica reforma a la salud del presidente Gustavo Petro, que se encuentra agonizando en el Congreso.
“La salud se hunde porque no le pagan, porque ahora la quieren sobrecargar de burocracia so pretexto de hacer prevención”, aseguró el exmandatario y líder del Centro Democrático.
El expresidente también compartió que los senadores de la Comisión Séptima del Senado que firmaron la ponencia negativa de la reforma a la salud están siendo amenazados por tener esa posición. Una de las intimidaciones más graves las ha sufrido la senadora Norma Hurtado, del Partido de la U.
“Vemos con preocupación los hechos ocurridos en los últimos días, lo cual pone en un riesgo inminente nuestra integridad y la de nuestras Unidades de Trabajo Legislativo (UTL)”, aseguró Berenice Bedoya.
El tema es que gracias a estos ocho senadores que decidieron firmar la ponencia negativa de la reforma a la salud, la deja virtualmente hundida. Desde el Gobierno han buscado alternativas para sacar adelante el proyecto y se espera que los senadores no cambien de posición. Todo el país tiene los ojos puestos encima de ellos.
A esa posición se sumó la senadora Ana Paola Agudelo, del Partido Mira, quien aclaró que aunque no firmó la ponencia como los demás porque no es ponente, en el momento en que toque votar respaldaría la proposición de archivo. Negó que pueda llegar a apoyar una ponencia alternativa porque considera que los tiempos son muy justos para arrancar nuevamente esa discusión.
Este lunes 18 de marzo, en horas de la mañana, el presidente Gustavo Petro había citado a un desayuno a los 14 senadores de la Comisión Séptima del Senado, sin embargo, el encuentro se canceló, según se conoció, porque varios de los parlamentarios cancelaron la cita en la Casa de Nariño.
En las últimas horas, el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, tomó la palabra en el Congreso y propuso que lleguen a consensos para salvar las reformas. Incluso, reconoció que se pueden hacer grandes ajustes a los proyectos sociales y dijo que hay algunas propuestas pomposas que se pueden moderar.
Desde el petrismo no se han quedado quietos e intentan voltear los votos. La senadora María José Pizarro y el representante David Racero, ambos del Pacto Histórico, debían hacer lobby con los nueve senadores que tienen hundido virtualmente el proyecto.
Por su parte, los ministros del Interior, Luis Fernando Velasco, y de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, aunque se han movido, no son los principales alfiles buscando sacar adelante el proyecto. En cambio, la directora del Dapre, Laura Sarabia, llamó vía telefónica a varios senadores que firmaron la ponencia de archivo. Ella fue quien extendió la invitación al desayuno privado con Petro, que estaba programado para este lunes, pero que se canceló.
Los senadores han dicho que no cambiarán de decisión. “Dejamos claro que no retiraremos las firmas de la ponencia de archivo, no cambiamos nuestro voto en contra de una reforma que es inconveniente. Tampoco apoyaremos una reforma alternativa a la salud”, informaron en un comunicado.
Esos congresistas son: Lorena Ríos (Colombia Justa Libres), Alirio Barrera (Centro Democrático), Nadia Blel (Partido Conservador), Honorio Enríquez (Centro Democrático), Miguel Ángel Pinto (Partido Liberal), Berenice Bedoya (ASI), Norma Hurtado (La U) y José Alfredo Marín (Partido Conservador). Además de la posición de Ana Paola Agudelo.
Para el presidente Gustavo Petro, la reforma a la salud se convirtió en un asunto de honor que puede incidir en el futuro de las demás reformas pendientes para ser debatidas en el Congreso. El tema es que el Gobierno actualmente no tiene las mayorías y por eso Petro ha recurrido a ideas como una asamblea nacional constituyente.