A las 6:00 de la mañana de este viernes 13 de octubre, el teléfono de la familia de Antonio Macías Montano, en Bogotá, sonó repetidamente. Desde Israel, sus otros parientes confirmaron la trágica noticia: este joven de 28 años, que había estado en la misma fiesta electrónica en la que participó Ivonne Rubio y que le costó la vida, también fue asesinado. Su cuerpo fue hallado después de múltiples pruebas de identidad y, como era de esperarse, su físico está irreconocible, contó la familia.
“Lo encontraron muerto, con signos de bala, estaba baleado, inflamado por la descomposición porque se demoraron un poco en reconocerlo”, le contó a SEMANA Álex Macías, primo de Antonio, quien a través de sus redes sociales pidió más de una vez noticias sobre su pariente.
El colombo- israelí, de profesión peluquero, participó de la fiesta a menos de 5 kilómetros de la Franja de Gaza, que fue interrumpida por decenas de terroristas de Hamás que hicieron apagar la música y empezaron a disparar hacia todos los frentes.
Macías y su pareja sentimental, también colombiana, buscaron refugio en un búnker de protección aérea, pero allí fueron encontrados por el grupo islámico. Les lanzaron explosivos y, posteriormente, los remataron.
“Él estaba herido, según contó uno de sus amigos, creemos que los terroristas lo remataron”, narró Macías, visiblemente sorprendido por lo que pudo ocurrirle a su pariente. Él se refiere a un ciudadano norteamericano que estuvo con Ivonne y Antonio en la fiesta que, extrañamente, logró salir con vida.
“Fue una mala idea meterse en el búnker porque no tenía puertas y ahí llegaron estos hombres y los encontraron casi a todos”, dijo.
La familia del joven pasa por un momento muy difícil. No obstante, la angustia y el desespero, han terminado. “Mi tía –madre de Antonio– nos envió un mensaje admirable por la forma como ha asumido la situación. Obviamente, están tristes, desgarrados porque perdieron a su hijo, pero están tranquilos en medio de todo: se quita esa angustia de saber cómo estaba, si lo tenían secuestrado, si lo estaban torturando. Duele mucho lo ocurrido, pero, al menos, no lo hicieron sufrir más”, añade Álex. “Mi familia está tranquila, pero con el corazón roto”, describió.
Antonio, según las primeras informaciones, fue encontrado cerca del búnker de protección aérea, el lugar donde Ivonne también apareció. Ella fue reconocida primero por Andrés, su hermano, y a través de pruebas de ADN, pero faltaba él. A su lado había decenas de cadáveres, algunos de los cuales están siendo reconocidos actualmente.
Ante ese escenario tan convulsionado en Tel Aviv, Álex Macías le insistirá a su familia que tomen la decisión de regresar a Colombia, al menos mientras Israel termina por cobrar venganza de todos sus muertos a Hamás. “Allá la guerra está muy fuerte, es mejor que estén acá en Colombia”, dijo.
El sepelio del colombiano será en Jerusalén durante el fin de semana y lo presidirá una familia que el jueves pasado, en medio de escenas desgarradoras, sepultó por medio del ritual judaista a Ivonne Rubio.
De esa pareja sentimental quedan dos niños huérfanos de 6 y 4 años.