El Consejo Nacional Electoral decidió este miércoles 19 de julio sancionar al Partido Liberal porque durante más de dos años no convocó a una convención nacional que busca, entre otras cosas, elegir una nueva dirección de la casa política.
La ponencia fue de la magistrada Fabiola Márquez, presidenta del CNE, y cercana al gobierno del presidente Gustavo Petro.
De acuerdo con la decisión, que será notificada en las próximas horas al trapo rojo, el partido político que lidera el expresidente César Gaviria deberá convocar en los próximos cuatro meses a una nueva asamblea y ahí tomar sus decisiones, entre ellas, si escogen a una nueva mesa directiva.
Además, se impone una sanción de 25 millones de pesos “por la vulneración al inciso segundo del Artículo 108 de la Constitución Política (...) con ocasión de la omisión de la celebración por lo menos durante cada dos años de convenciones que posibiliten a sus miembros influir en la toma de decisiones más importantes de la organización política”, argumentaron los magistrados.
Según la decisión electoral, “el retraso sistemático para no realizar la convención por parte del Partido Liberal restringe el ejercicio de derecho de participación a sus miembros activos militantes e influye en la toma de decisiones más importantes de esta colectividad”.
El expresidente Gaviria dijo en su momento que la ponencia de la magistrada Márquez obedecía a una retaliación del Gobierno nacional por sus constantes críticas al arranque del gobierno de Gustavo Petro. De hecho, la oficina jurídica del trapo rojo recusó a la magistrada, pero el recurso no prosperó y la postura de Márquez fue votada por unanimidad entre los togados este miércoles.
Aunque la magistrada Márquez ganó porque triunfó su ponencia, también perdió porque ella pretendía que el Partido Liberal convocara a su convención el 21 de junio de 2023, es decir, un mes después de proferida su decisión. Los demás magistrados no compartieron dicha pretensión de Márquez, porque a la Liga de Gobernantes Anticorrupción, el partido político de Rodolfo Hernández, el CNE le concedió seis meses para adelantar su convención.
Esa jugada de Márquez fue interpretada por algunos sectores del liberalismo como una estrategia del Gobierno para convocar a una convención que dejara por fuera al expresidente César Gaviria de la dirección y entorpecer la entrega de avales de candidatos a concejos, asambleas, alcaldías y gobernaciones. Esta es una de las herramientas que tiene hoy la dirección del partido para garantizar la unión y la posición frente a las reformas del Gobierno Petro.
No se pueden olvidar las diferencias entre Gaviria y el hoy ministro del Interior, Luis Fernando Velasco.
La decisión que tomó este miércoles el Consejo Nacional Electoral no afecta la entrega de avales por parte del Partido Liberal porque esta decisión, posiblemente, será apelada por las directivas del trapo rojo. Y, posteriormente, se contarán cuatro meses, es decir, podría pasar el 2023.
En la providencia quedó claro que, a través de la magistrada Fabiola Márquez, o el despacho de Asesoría de Inspección y Vigilancia del CNE, se hará seguimiento a la celebración de la IX convención nacional del liberalismo.