Desde la pasada campaña presidencial, Gustavo Petro entendió que los influenciadores en redes sociales le servirían como caballito de batalla para llegar al poder. Así quedó evidenciado en los ‘petrovideos’, en los que se demostró que había una estrategia liderada por el actual cónsul de Colombia en Chile, Sebastián Guanumen, quien tenía una lista con decenas de estas personas que le ayudaban a difundir mensajes que impactaran a los más jóvenes y así lograr posicionar a Petro. Hoy, varios de esos influenciadores, que posaban de independientes en el pasado, han terminado favorecidos con importantes contratos en el Gobierno.
SEMANA hace una radiografía de dónde están ubicados y los jugosos salarios del Estado que han obtenido con el Gobierno de Petro, simplemente por el hecho de ser afines ideológicamente al mandatario. Sobre varios de ellos recae el cuestionamiento de que no tendrían la suficiente experiencia para sus cargos.
El más polémico ha sido el de Jader David Rozo Rojas, más conocido como Don Izquierdo, quien en el pasado cuestionaba que estos opinadores, incluso él, tuvieran contratos con el Estado. Sin embargo, hoy, que es beneficiario, piensa distinto. Incluso, en un momento dijo que cerraría sus redes sociales si contrataba con el Estado. ¿Cumplirá su promesa?
“Ay, Rebeca. Aquí la única que toma posiciones políticas por contratos eres vos. Muestra los míos. Al menos uno. Te juro que cierro mi cuenta y todas mis redes sociales. Hagan oposición con altura. Ustedes pueden”, aseguró Rozo en 2023, en respuesta a una influenciadora de derecha.
Sin embargo, Rozo sigue con sus cuentas activas tirando dardos a periodistas y opositores de Petro, a pesar de que entró a trabajar en RTVC con un salario de 5.925.000 pesos. El influencer no cuenta con un título profesional, pero gana más que otros comunicadores que llevan años en el canal. Su trabajo será hacer “periodismo digital” para el sistema de medios públicos. El valor total del acuerdo es por 35.550.000 pesos por seis meses.
Para acceder a ese contrato, según los requisitos, necesita por lo menos 25 a 35 meses de experiencia en cargos relacionados. El problema es que, según la documentación presentada por Rozo, solo tiene experiencia como community manager en la empresa Colcrit S. A. S. entre el primero de febrero de 2021 y el 30 de noviembre de 2023. Esa empresa, que fue creada en marzo de 2020, es la propietaria de la página Frente al Poder, otro medio de corte petrista con la que se difunden noticias en favor de la izquierda.
Los beneficios de Lalis
Otro de los influenciadores que ha sido beneficiado con contratos del Gobierno es Laura Daniela Beltrán Palomar, más conocida como Lalis, quien también tiene rabo de paja porque era una de las activistas que denunciaban a los contratistas cercanos al Gobierno anterior, pero ahora ha sido una de las mayores beneficiadas de las arcas del Estado.
Lalis primero fue contratista de Colombia Compra Eficiente, otra entidad en la que han aterrizado varios de los influenciadores defensores de Petro. Allí fue asesora en comunicaciones y redes sociales. El contrato era por 51 millones de pesos; sin embargo, solo obtuvo un pago de 9 millones de pesos porque decidió terminar anticipadamente el contrato.
Posteriormente, Lalis llegó en octubre de 2023 al Departamento para la Prosperidad Social (DPS) cuando estaba a cargo la exdirectora Laura Sarabia, hoy directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre). Allí estaba encargada del área digital para hacer contenidos para las redes sociales. El contrato era hasta diciembre de ese año por 17.503.333 con pagos de 5.834.444 pesos.
Ahora, Lalis aterrizó en la Superintendencia de Industria y Comercio, que está a cargo de Cielo Rusinque. Allí es asesora en grado cuatro para apoyar temas relacionados con comunicaciones, según dijo la misma Rusinque, quien defendió el nombramiento. El suelo de Lalis en la entidad es de 5.466.037 pesos.
A Colombia Compra Eficiente también llegaron varios activistas de redes sociales que trabajaron en el programa Wally opina en medio de la gestión del exdirector Stalin Ballesteros, quien renunció al cargo luego de que Day Vásquez dijera que se debería poner el ojo en la entidad.
En Colombia Compra Eficiente aterrizaron Nicolás Javier Garzón, quien tiene un contrato por 180 millones de pesos para manejar temas de comunicaciones internas y externas; también está Ricardo Malagón, con un contrato por 144 millones de pesos para apoyar la comunicación estratégica, y Ricardo Pajarito, actual coordinador de comunicaciones de la entidad. Todos han pasado por el programa de Wally opina, en el que este influenciador apoya a Petro y a sectores de izquierda, mientras ataca y se burla de políticos de derecha.
Uno de los cuestionamientos con los contratos de los exempleados de Wally opina es que varios de ellos se certificaron entre ellos mismos. Por ejemplo, Malagón fue director del medio petrista Al Punto, por medio del cual le convalidó la experiencia a Laura Viviana Montaña Ramos, otra persona beneficiada con un contrato de más de 50 millones de pesos con la entidad. Malagón también validó la experiencia de Nicolás Garzón para que llegara a la entidad. Varios de ellos también pasaron por Contravía, el canal digital de los hermanos Hollman y Juan Pablo Morris, lo que termina relacionando a todos los comunicadores que han sido beneficiados.
Actualmente, Hollman es el subdirector de RTVC, donde ha sido denunciado por supuesto acoso laboral. Mientras que Juan Pablo salió del Ministerio de Salud, donde era asesor de comunicaciones. En los últimos días, el representante Andrés Forero mencionó a los hermanos Morris en una denuncia del Ministerio por presuntos sobrecostos en un contrato entre la entidad y RTVC para una marcha que organizaron a favor de Petro en septiembre del año pasado. Por esa denuncia, la Fiscalía ya anunció la apertura de una investigación.La relación entre Wally opina y Hollman Morris es evidente.
SEMANA conoció que el director y figura de ese programa, Walter Rodríguez, suena fuertemente para ser contratista de RTVC; no obstante, hasta el momento no se le ha podido encontrar el espacio, que, se habla, sería de opinión. Es decir, Wally podría llegar a tener su programa, que tiene un evidente sesgo político a favor de Petro y la izquierda, con recursos de la televisión pública de todos los colombianos y en señal abierta. Esta revista consultó al creador de contenido para saber si llegaría a la entidad, pero no respondió los mensajes.
Otro de los que ha terminado beneficiado de los dineros del Gobierno es Celso Galeano Tete Crespo, quien tuvo durante unos meses un importante contrato con el Ministerio de Ambiente. Inicialmente, era por 120.266.667 pesos, es decir, un pago de 11 millones de pesos por casi 11 meses. Sin embargo, ese contrato se finalizó antes. Tete Crespo también fue asesor de Gustavo Bolívar, hoy director del DPS, cuando era senador.
Todos estos influenciadores del petrismo se caracterizan por atacar a los medios de comunicación y periodistas que cuestionan con argumentos al presidente Petro o lo dejan en evidencia.
La periodista Diana Giraldo fue una de las víctimas de David Rozo por cuestionar su jugoso contrato. El problema es que Rozo le contestó responsabilizándola de tener que ver supuestamente con el asesinato de Josué Castellanos Pérez, un líder social de Tame, Arauca.
Lo más grave es que la gerente de RTVC, Nórida Rodríguez, quien firmó el contrato de Rozo, lo defendió y evadió responsabilidades. “Querida Diana, sorprendida con tu pregunta. ¿Cómo es posible que deba explicarte a ti, que has dirigido medios, que las opiniones personales de los contratistas bajo ninguna circunstancia comprometen las institucionales? ¿Acaso sabrías cómo controlar la opinión de más de 2.000 contratistas en RTVC? ¿Y cómo es posible que digas que se contrató a David para hacerte tales señalamientos? Un poco de mesura, por favor”, dijo Rodríguez.“Al menos ya estamos notificados que los contratistas tienen luz verde para ‘opinar’ lo que quieran y señalar como quieran…”, le contestó Giraldo.
Los influenciadores petristas se han caracterizado por hacer críticas sin fundamento y con palabras de grueso calibre, sin ningún tipo de control o sanción. Ahora, como ha quedado en evidencia, podrán hacerlo con el aval de funcionarios del Gobierno y ganando sueldazos, algo que resulta peligroso y que cuestionaban cuando eran oposición.