La designación de Laura Sarabia como directora del Departamento de Prosperidad Social (DPS) fue, para algunos, otro desacierto del presidente Gustavo Petro. La joven politóloga, que dejó de ser la jefa de gabinete por el escándalo de las chuzadas a su exniñera, Marelbys Meza, regresó al Gobierno para manejar la chequera con los recursos para las poblaciones más vulnerables de Colombia.
Entre quienes reprochan el nuevo cargo que asumirá Sarabia, sobresale la senadora María Fernanda Cabal, una de las férreas opositoras al Gobierno. La congresista dejó ver la paradoja de que la otrora mano derecha del presidente Petro pase a ser la directora del DPS, mientras la Fiscalía pide cárcel para cuatro policías por interceptar ilegalmente no solo a Marelbys Meza, sino a Fabiola Perea, otra exempleada.
Los uniformados fueron imputados por el ente acusador e investigador por los delitos de fraude procesal y falso testimonio. La Fiscalía, además, solicitó la cárcel para los oficiales.
“La Fiscalía sí exige esa urgencia como quiera que existan motivos graves que permiten inferir que los indiciados podrían ocultar o falsificar elementos de prueba o inducir elementos de prueba o se comporten de forma desleal o reticente”, pidió el ente en la audiencia.
En ese contexto, se pronunció María Fernanda Cabal en su cuenta en X:
“Mientras son imputados cuatro miembros de la Policía por la actuación del polígrafo contra Marelbys Meza, exniñera de Laura Sarabia, ella toma posesión en uno de los cargos más poderosos del Estado, donde manejará casi $ 11 billones de pesos”.
La designación de Laura Sarabia llega en un momento judicial difícil para ella, dado que la investigación en su contra por el escándalo de la exniñera lo asumirá la Corte Suprema de Justicia.
El alto tribunal decidirá si avanza al ritmo de la Fiscalía General de la Nación en las investigaciones o, por el contrario, tomará más tiempo para determinar judicialmente la posible responsabilidad de la joven en la utilización del polígrafo del palacio presidencial.
Sarabia llega a reemplazar como directora del DPS a Cielo Rusinque, que se quedó por fuera del Gobierno, pese a los rumores de que iba a pasar a ser la nueva jefe de gabinete del presidente Petro.
“Quiero agradecer al presidente su voto de confianza. No estaré por el momento en el Gobierno. Si alguien sabe y tiene autoridad para disponer quien lo acompaña y a dónde es él. No hay pulsos de poder en Casa de Nariño, allí la lucha diaria es por el bien de Colombia”, dijo Rusinque días atrás.
Diego Molano, uno más contra la designación de Laura Sarabia
Una semanas atrás, el exministro Diego Molano, hoy candidato a la Alcaldía de Bogotá, afirmó que la designación de Laura Sarabia sería un irrespeto para las familias vulnerables de Colombia, es decir, las que se ven cobijadas por los recursos a cargo del DPS.
“Las familias vulnerables de Colombia se respetan. Que Laura Sarabia, quien torturó a su empleada, quien torturó a una madre cabeza de hogar, quien torturó a quien le prestaba los servicios en su hogar, no puede ser la directora del DPS”, expuso Molano.
La “empleada” de Sarabia a la que Molano hizo referencia es Marelbys Meza, su exniñera, que terminó siendo víctima de interceptaciones ilegales.
“El DPS es un programa que maneja los apoyos de todo el gobierno colombiano a las familias más vulnerables y a las mujeres más vulnerables. Y hoy, cuando ella está en cuestión, como directora del DPS, es una bofetada contra todos aquellos que creemos que en lo social se debe respetar a las mujeres que todos los días salen a trabajar con dedicación, esmero y orgullo, por sus hijos y su familia.