Desde que llegó Gustavo Petro a la Presidencia de Colombia, el mandatario dejó claro que el fracking en nuestro país estará prohibido, medida que poco gustó en varios sectores de la oposición al gobierno de turno.

María Fernanda Cabal, senadora del Centro Democrático, se refirió al nuevo anuncio del Gobierno de Reino Unido en donde se levantó la prohibición al fracking y lo comparó con lo que actualmente ocurre en nuestro país. “Levantan prohibición al fracking en Reino Unido. Se dieron cuenta de que el populismo no produce energía, sino proeza y destrucción”, se lee en la publicación de su perfil de Twitter oficial.

El presidente Petro siempre ha sido consecuente con su idea y desde hace un tiempo lo ratificaba en sus discursos y por medio de sus redes sociales. El mandatario nunca ha ocultado su rechazo a esta técnica y reiteró en su momento que durante su gobierno no habrá fracking, en una respuesta al reconocido economista Jorge Restrepo.

“No habrá fracking en Colombia”, fue lo que dijo Gustavo Petro a los cuestionamientos de Restrepo tras a las declaraciones de la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, quien indicó que una de sus prioridades será suspender los pilotos de fracking que ya están aprobados.

¿Por qué se levantó el fracking en Reino Unido?

Debido a la crisis energética por la que pasa ese país, la primera ministra, Liz Truss, anunció sus medidas para afrontarla, que incluyen la congelación de precios durante dos años para los hogares, el fin del fracking de manera temporal y reexaminar los objetivos climáticos del Reino Unido.

La congelación de precios representará un ahorro de unas 1.000 libras (1.150 dólares) al año para un hogar medio, en comparación con la subida de 80 % del tope tarifario que estaba prevista el primero de octubre, precisó Truss en el parlamento dos días después de su nombramiento en reemplazo de Boris Johnson.

Las empresas e instituciones como las escuelas y hospitales recibirán por su parte una “ayuda equivalente durante seis meses”, precisó ante unos diputados que la interrumpieron en repetidas ocasiones durante su intervención.

“Es el momento de ser audaz. Nos enfrentamos a una crisis energética (...) y estas intervenciones tendrán un coste”, advirtió, sin embargo, después de haber eludido la víspera preguntas de la oposición sobre cómo piensa financiar unas políticas que se encaminan a engordar la ya muy abultada deuda pública británica.

La primera ministra anunció también un incremento de las licencias para la extracción de petróleo y gas en el mar del Norte y el fin de una moratoria sobre la fracturación hidráulica o fracking, un controvertido método de extracción de combustibles fósiles que estaba hasta ahora prohibido en el Reino Unido. Se impulsará asimismo la construcción de centrales nucleares y la producción de energía renovable.

“Décadas de pensamientos a corto plazo en materia de energía” y la incapacidad de asegurar su suministro hicieron al Reino Unido, que depende en gran medida de la importación de gas para cubrir sus necesidades energéticas, vulnerable a las crisis de precios, denunció Truss.

*Con información de AFP.