SEMANA: Quedan dos semanas de sesiones del Congreso. ¿Cuál es la situación de la reforma pensional? ¿Se va a hundir?
MARTHA ALFONSO: Esperamos que no y estamos haciendo todo lo posible para que salga adelante. Es una reforma muy importante que garantiza una mayor redistribución de la riqueza, permite que los que menos tienen o no tienen nada sean cobijados por un sistema de protección a la vejez, especialmente los adultos mayores que nos conmueven vendiendo comida en las calles, pidiendo refrescos. Para esas personas esta reforma es urgente y por eso estamos tratando de empujarla para que salga. Tenemos un problema en contra, una desventaja que es el tiempo, pero tenemos una fortaleza y es que es una reforma muy bien construida técnicamente, por eso ha generado tanto consenso. Está respaldada por el Ministerio de Hacienda, que dio concepto positivo, y el alto nivel de consensos que hemos tenido hasta hoy va a permitir que el debate fluya rápidamente.
SEMANA: Ese concepto positivo dice que para 2067 va a ser necesaria una nueva reforma porque los recursos no van a alcanzar. Si se va a necesitar otra reforma, ¿por qué no se ajusta todo desde ya?
M.A.: Cuarenta años es un largo plazo. El sistema pensional actual ha tenido por lo menos tres ajustes jurídicos, paramétricos y financieros. Ningún sistema en el mundo es estático durante más de 15 o 20 años porque depende del mercado laboral, las dinámicas de la economía y las demográficas. Es imposible pensar que una reforma va a ser sostenible, inamovible y quieta durante 50 o 100 años. Acá se proponen 40 años de un horizonte de estabilidad, pero que obligatoriamente va a tener que ajustarse antes de ese periodo para que logre sostenerse en el tiempo. Cuando tengamos que hacer una nueva reforma tendrán que ajustarse semanas, edades y otros criterios del sistema pensional.
SEMANA: ¿Los colombianos tendremos que pensionarnos más tarde y con más semanas para que sea sostenible darles pensión a las personas?
M.A.: Uno de los ajustes de fondo que se está solicitando por muchos expertos es que se aumenten las semanas o la edad de pensión. Ese debate no lo quiso dar el Gobierno y lo que hace es ajustar otros componentes del sistema, pero con absoluta seguridad en 20 o 30 años tendremos que hacer un ajuste en ese sentido. Todos los países tendrán que hacer ajustes a sus sistemas, posiblemente orientados a aumentar la edad de jubilación porque tendremos más expectativa de vida. Los ajustes paramétricos son un elemento connatural a las dinámicas de los sistemas pensionales.
SEMANA: Menciona que el Gobierno no quiso dar el debate de subir la edad de pensión, de hecho ningún Gobierno lo ha hecho porque es impopular. ¿Qué le pide a Petro para estas dos semanas?
M.A.: Le pido que establezca un diálogo con la mesa directiva de la Cámara de Representantes, que me tiene sorprendida porque las citaciones que está haciendo nos quitan oxígeno cada vez más. Le pido que le mande un mensaje al Congreso de la República, especialmente a la Cámara de Representantes, para que haya mayor rigor y disciplina en el cumplimiento de horarios y de agendas programadas de los órdenes del día para que podamos avanzar. Esta laxitud en la programación de las sesiones va a perjudicar una reforma que es estructural para el país. Esta es una reforma que genera estrategias para que personas que ya teniendo la edad, pero que les hacen falta semanas o que no han completado la cantidad de plata que tienen que ahorrar, que son gran mayoría de los que están afiliados a fondos privados, no han podido pensionarse.
SEMANA: Pero la presidencia de la Cámara está en manos de Andrés Calle, liberal de la bancada del Gobierno. ¿Le ha faltado compromiso con la reforma pensional?
M.A.: No entiendo qué pasa. En varias oportunidades se lo he manifestado y es que él más que nadie sabe la necesidad del agendamiento de esta reforma y los agendamientos que ha estado haciendo no ayudan. Que convoque un lunes festivo a las cinco de la tarde me genera muchas dudas de su compromiso con este debate (al cierre de esta edición, la citación fue cancelada). Esperaba que hubiese agendado desde muy temprano porque en el Congreso ha hecho carrera una cultura institucional desafortunada de empezar dos horas después de que se cita, lo que nos perjudica a todos los colombianos porque es tiempo perdido. Me deja preocupada, no sé si sea falta de compromiso, no sé cuál sea su lectura de la dinámica del Congreso, pero lo cierto es que tenemos un escenario muy complicado.
SEMANA: Hay tres EPS que manifestaron su necesidad de salir del sistema de salud porque las finanzas no dan, se implementó un sistema de salud de los maestros que ha tenido problemas y hay varias EPS intervenidas. ¿Esto es una señal de que hacía falta la reforma a la salud o de que la reforma que planteaba el Gobierno no les funcionaba a los colombianos?
M.A.: La reforma era absolutamente necesaria. Estamos viendo una situación muy grave. Se está demostrando que realmente no hay una falta de recursos de la UPC, sino una muy mala administración. Es desafortunado que las EPS, después de 30 años de haber vivido de los recursos de la salud de los colombianos, y hoy que hay un Gobierno que decide no darles más plata porque ya se han hecho salvamentos financieros, digan ahora que los ajustes para la sostenibilidad del sistema no les sirven. Eso no es ético, no es responsable, es una ingratitud infinita con el pueblo colombiano, que durante 30 años financió muchas de sus empresas y de su crecimiento económico. Esperaríamos que tengan una actitud solidaria de diálogo, de mirar cómo logramos reencauzar este sistema. La reforma sigue siendo necesaria y estaremos al frente tratando de impulsarla.
SEMANA: Pero con el Fomag, ¿esto puede ser un antecedente para mostrar que hay una incapacidad de las entidades públicas, del Gobierno, para tener a cargo la salud? La crisis sucedió con 800.000 personas, ¿qué pasaría con una reforma para 50 millones de colombianos?
M.A.: El Fomag y el régimen de salud de los maestros es distinto al sistema general. Lo que ha planteado Fecode es que el problema no es del modelo que se concertó, sino que es un problema político desde la presidencia de la Fiduprevisora, que en lugar de implementar lo que se concertó, terminó volviendo a intermediar la salud contratando con los mismos operadores. No hay una incapacidad del Gobierno, sino un problema político de profundas dimensiones, porque no se pone al frente gente que realmente quiera implementar esos modelos.
SEMANA: Hablaba de “estar al frente” y la Alianza Verde tiene la presidencia de la Cámara de Representantes en la próxima legislatura. ¿Usted se ve como presidenta de la Cámara? ¿O cree que una compañera de bancada suya sería la presidenta?
M.A.: Le haría mucho bien a la presidencia de la Cámara una mujer. Sin embargo, tengo distancias enormes con las posiciones políticas de Katherine Miranda, que es una de las candidatas. Si la Cámara de Representantes confiara en mí y me pusiera esa tarea, estoy lista para servirle a la Cámara y al país. Pero también quiero decir que en este momento no estoy haciendo campaña porque estoy concentrada en sacar una reforma pensional para los colombianos, para la gente más humilde, para la gente que no alcanza a pensionarse en el régimen privado que hoy tenemos, que compite con el público, quienes no han podido pensionarse por este sistema medio absurdo que tenemos en Colombia.
SEMANA: No está en campaña, pero su nombre está sobre la mesa...
M.A.: Sí. Y mucha gente me lo ha dicho: “Tú deberías aspirar”. Me ofrecen su respaldo, pero en este momento estoy concentrada en la reforma pensional. Sin embargo, no descarto la posibilidad de servirle a la Cámara de Representantes porque creo que si la presidencia de la Cámara estuviera en manos de Katherine Miranda, muchos de nosotros y nosotras, representantes a la Cámara, no tendríamos garantías en su presidencia. Es una persona que ha mostrado una clara posición política e ideológica contra el Gobierno, contra sus reformas y quienes defendemos esas reformas que creemos son para la gente, seguramente no vamos a tener garantías en una presidencia suya.
SEMANA: ¿Del Gobierno le han enviado mensajes para que sea la candidata?
M.A.: Me he enterado de ser ponente de las reformas a la salud y la pensional por los medios. Y estoy lista para servirle al país porque yo coincido con este Gobierno en sus propósitos de redistribuir la riqueza, de mejorar las condiciones de vida del país, y en eso nos encontramos en la esfera pública. Pero no tengo ninguna relación personal que me permita saber qué están pensando, no he sido convocada a una reunión formal en donde me manifiesten algún interés de que yo lidere una campaña para la presidencia de la Cámara. De hecho, creo que el Gobierno poco se está metiendo en esa discusión.