Luego de varios emotivos y conmovedores testimonios de las madres de los jóvenes víctimas de los falsos positivos de Soacha, en el marco del evento del perdón público del Estado por las ejecuciones extrajudiciales, el presidente Gustavo Petro les envió un mensaje a los familiares de las víctimas.
Petro, en un discurso que dio tras no llegar a tiempo al evento, les ofreció perdón a las madres de Soacha, señalando que ese tipo de hechos dantescos no se debe repetir en la historia del país.
“¿Cómo es que se pueda votar por matar? ¿Cómo es que se puede aplaudir la muerte sistemática en Colombia? ¿Cómo es que se puede hacer presidente al que más mate?, ¿al que más violencia prometa, al que más barbarie establezca?”, sostuvo Petro.
También indicó en su declaración: “En el asesinato de estos jóvenes no solo está el mecanismo bárbaro de cambiar ascensos por muertos. Ese tema lo discutirán también las fuerzas militares en su interior”.
“Pero es uno peor el de cambiar votos por muertos. Porque se aspiraba a dar una nueva elección. Y entre más muertos hubiera, entre más gente joven, uniformada, con botas de caucho se mostrara en las pantallas de televisión, en donde los periodistas no preguntaban el porqué, sino que sacaban la foto”, detalló el mandatario colombiano.
También aseguró: “Tenían más votos. Se aplaudía más duro en Colombia. Se elegía al que más mataba. Y por eso esta fila de botas se fue volviendo interminable. Y por eso esa fila de jovencitos se fue volviendo interminable. Y por eso es interminable la fila de las madres”, agregó.
“Y por eso es interminable el dolor. Y por eso es interminable incluso la rabia que se siente. Ocultaron para que siguieran matando. Para que la codicia pudiera ser. Para que la concentración de la riqueza fuese mayor. Para que más la tierra fértil quedara en pocas manos. Para que más la riqueza que deja la cocaína sucia de sangre quedara en unos pocos bolsillos asesinos”, indicó.
Además, detalló en su tesis:
“Por eso, como presidente de la República de Colombia, de este que es un gobierno popular, y en el que espero que cambie la mentalidad de elegir al que más mata, sino al que más hace vivir o a la que más hace vivir, la política de la muerte por la política de la vida, del cuidado de la vida en Colombia, que es el país de la belleza. Por eso ese cambio de política, que ojalá sea posible en la mente y en el corazón de la ciudadanía, yo me permito pedirles perdón, madres”.
El conmovedor testimonio de las madres de Soacha en acto de perdón del Estado por falsos positivos: “No vamos a desfallecer hasta encontrar al último desaparecido”
Las llamadas Madres de Soacha, víctimas de los falsos positivos, hablaron en el acto de perdón del Estado colombiano por el asesinato de jóvenes que se registró entre 2004 y 2008.
Los actos conmemorativos tuvieron lugar en la plaza de Bolívar, en Bogotá, y desde allá diferentes actores del Estado sentaron un precedente de perdón por las mujeres que perdieron a sus hijos en medio del conflicto armado.
Las madres estiman que hubo 6.402 víctimas de casos de falsos positivos en Colombia, casos a los que la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) les está haciendo seguimiento para determinar qué pasó con esos jóvenes que fueron asesinados en el marco del conflicto.
“No vamos a desfallecer hasta encontrar al último desaparecido, hasta encontrar al verdadero responsable, hasta conocer en realidad quién dio la orden de todos estos crímenes”, aseguró una de las madres, Jaqueline Castillo, desde la tarima dispuesta en la plaza de Bolívar, tras cuestionar severamente que los gobiernos anteriores no le ayudaron a buscar a su hijo.
Y continuó: “No nos van a callar, vamos a seguir contando esta historia porque todavía hay muchas partes del mundo que no creen que esto es cierto”.
Las madres cuestionaron las reparaciones que se han dado a través de la JEP.
Pese a que el Estado les pidió perdón y reconoció la culpa de las Fuerzas Militares en el asesinato de esos jóvenes víctimas del Estado, las madres fueron enfáticas al señalar que seguirán en la lucha hasta que se esclarezcan todos los casos de ejecuciones extrajudiciales perpetradas por agentes del Estado.
“Hoy es un día muy especial y sentido en honor a nuestras familias víctimas. A mi pequeño angelito (Jaime Stiven), pero mi más grande héroe, con los hechos y las denuncias, pudimos mostrarle al mundo la verdad y salvar muchas vidas más. No fue, ni es, como Álvaro Uribe Vélez y su cúpula militar quería hacer ver estos hechos”, sostuvo María Ubilerma Sanabria López, madre de Soacha, quien además es víctima de exilio por las amenazas que recibió de cuenta de su lucha.
Las madres finalmente aseguraron que la causa por la búsqueda de sus hijos las llevó a ser investigadoras y periodistas para recabar las pruebas sobre la muerte de sus familiares que el Estado se demoró en encontrar.