La vicepresidenta Francia Márquez, por medio de una transmisión en Instagram, respondió a las críticas por vivir en una lujosa casa en un sector exclusivo del Valle del Cauca y sus traslados en helicóptero hacia su residencia. De acuerdo con la funcionaria, su vida y la de su familia “cambió” cuando llegó al cargo.
“Decidí hablarles a los colombianos hoy a raíz de tantos comentarios malintencionados que hacen en las redes sociales. Lo primero que tengo que decir es que mi llegada a la Vicepresidencia ha cambiado mi vida. No solo la mía, sino también la de mi familia”, manifestó.
La vicepresidenta aseguró que este cambio en su vida fue su decisión por su compromiso por trabajar por Colombia. Sin embargo, afirma que sigue sintiendo que causa incomodidad hasta dentro del mismo Gobierno.
“Mi presencia en este lugar les genera incomodidad a muchas personas, se sienten incómodos. He visto, a veces, con la rabia que me miran y se expresan. Incluyendo muchos dentro del mismo Gobierno”, dijo.
Se refirió nuevamente a su familia, indicando que han vivido situaciones “de inseguridad muy fuertes, al igual que mi comunidad”. Dijo que, desde la pandemia, grupos armados ejercen presión en su territorio para la siembra de coca, cosa que no permitieron.
“Mi llegada a la Vicepresidencia le ha significado a mi familia muchas situaciones. Mis primas, mis hermanas y mis tías, aunque no lo crean, todavía trabajan en casas de familia. No porque yo llegué aquí, como lo piensa la gente, ya me volví millonaria”, expresó en la transmisión.
Márquez argumentó que un cargo no la hace millonaria: “Al contrario, siento que mi vida se volvió más costosa. Antes podía vivir con menos recursos, ahora la mayoría de los recursos los tengo que disponer para generar condiciones de seguridad”.
Narró que, después de ganar las elecciones, sujetos rompieron las rejas del conjunto residencial en el que vivía para ingresar. Una semana después, un vehículo derribó las rejas. “Eso no había pasado antes de que yo fuera vicepresidenta, llevaba tres años viviendo en el apartamento. Eso me generó preocupaciones y también a la gente de la unidad”, manifestó.
Márquez contó que buscó un lugar para vivir todos los fines de semana desde agosto hasta diciembre. “La gente me cerraba las puertas. Nadie le quería arrendar una casa a la vicepresidenta para su familia. A veces, cuando veían que era la vicepresidenta que estaba buscando, subían el valor del alquiler”, reveló.
“Todo el mundo busca cómo sacar provecho porque así acostumbramos a nuestra sociedad, así los políticos acostumbraron a nuestra gente”, agregó.
Luego, relató que una persona, al ver su desesperación por no encontrar casa y por tener a su familia encerrada en un apartamento, le ofreció su casa.
“Me dijo: ‘Véngase a mi casa’. Con todo, hasta tenía su ropa. Dejó todo para que yo estuviera ahí y después me dijo que me alquilaba. Esto para claridad de los que andan diciendo que he comprado una casa de 5.000 millones, no es cierto. Es más, les invito a que vayan a la oficina de instrumentos públicos y ahí se darán cuenta. No he comprado ninguna casa y si algún día llego a comprar una casa, lo haré con mis propios esfuerzos”, explicó la vicepresidenta.
Además, se refirió a las críticas de la senadora María Fernanda Cabal, a quien calificó como “furiosa” por su nivel de vida.
“Le digo: amiga, cálmate porque ese veneno te hace daño para tu ser. Sánate. El odio que lleva por la gente humilde es algo enfermizo en usted. Yo vivo en Dapa, como ya lo conté, en el mismo lugar donde, me han dicho, vive su familia. Vive su mamá. Pues yo no estoy yendo a la casa de su mamá a tocarle la puerta a pedirle nada. No le estoy diciendo a su familia que me pague los servicios o el arriendo, lo estoy haciendo con mi sueldo. Eso no es un delito, María Fernanda Cabal”, dijo.
Incluso, señaló el problema que tendría la senadora con su vivienda y los traslados en helicóptero: “El problema suyo es de clase, es que no acepta que una mujer como yo, humilde y afrodescendiente, ahora esté viviendo en el sector donde vive su familia. Ese es su problema, no es mi problema y resuélvalo usted. Pero yo, si puedo proteger a mi familia, lo voy a hacer”.
Sobre su transporte en helicóptero, la vicepresidenta dijo que, desde el intento de atentado camino a su casa en Suárez, el presidente Gustavo Petro le dijo que no viajara por tierra.
“Tenía preocupaciones sobre mi seguridad y que debía ser más cuidadosa. Me sugirió, entonces, que usara las herramientas que tiene el Estado. Esta no es una cosa de Francia Márquez, todos los presidentes, vicepresidentes y ministros han usado los aviones y helicópteros que tiene el Estado. No tiene solo uno, María Fernanda Cabal”, agregó Márquez.
La respuesta a la senadora uribista continuó: “Usted le está diciendo al país que por transportarme a mí dejaron morir a un soldado. Eso no es cierto. Yo lamento la muerte del soldado y expreso a la familia mi solidaridad, pero no es que porque me transportaran a mí se murió el soldado. Podemos verificar la fecha. Verifique si el 30 de diciembre yo me movilicé en un helicóptero. Aunque lo hubiera hecho, el Estado tiene más de 100 helicópteros a disposición de las distintas acciones que hace el Estado”.
Finalmente, la vicepresidenta envió un mensaje a favor de la ‘paz total’ y aseguró que de ella no se debe esperar “corrupción”.
“Vengo de una familia humilde y si algo me enseñaron fue la honestidad”, concluyó Márquez al terminar la transmisión.
Esta es la lujosa vivienda
No hay duda de que la vicepresidenta Francia Márquez fue el gran fenómeno electoral en las pasadas elecciones. Su designación en el segundo cargo del Ejecutivo, después del presidente, se lo ganó a pulso, en medio de un ascenso vertiginoso hacia el reconocimiento y posicionamiento mundial como una de las mujeres más importantes en la arena política en el país.
Mujer afrodescendiente, activista de derechos humanos, ambientalista, abogada, de origen humilde, venida de esa Colombia profunda por mucho tiempo olvidada e invisibilizada, Márquez despertó la esperanza de miles de ciudadanos.
Sin embargo, en los últimos días, la vicepresidenta ha acaparado la atención, más que por sus gestiones en el cargo, por el ostentoso modo de vida que estaría empezando a llevar.
Lo poco que se sabe de los ingresos y estado de las finanzas de Márquez, más allá de su salario de 25,8 millones como vicepresidenta, está consignado en su declaración de renta, publicada hace 15 días, en la que reportó un patrimonio, es decir, bienes a su nombre, de 96 millones de pesos.
Sin embargo, como el reporte publicado corresponde al año gravable 2021, en ese momento aún no era vicepresidenta, por lo que no se puede determinar qué tanto ha impactado en su patrimonio el hecho de haber llegado al cargo.
Lo que sí ha llamado la atención es que la vicepresidenta, según videos divulgados por redes sociales, ha sido vista llegar varias veces a la semana en helicóptero a su lujosa vivienda ubicada en Dapa, en Valle del Cauca.
Dapa es un corregimiento del municipio de Yumbo, Valle del Cauca, muy cerca de Cali, reconocido como una región turística y especialmente por ser un sector de lujosas viviendas campestres de alto valor.
Frente a este tema, desde la Vicepresidencia le indicaron a SEMANA que, efectivamente, Márquez sí vive en esta zona, a la que debe llegar en helicóptero por motivos de seguridad, ya que así lo recomendó un informe de las Fuerzas Armadas luego de un fallido atentado que le intentaron hacer con explosivos en Suárez, Cauca.
No obstante, la Vicepresidencia indicó que la casa que se ve en las imágenes que circulan por redes no es de la vivienda de Márquez, sino de un vecino. Asimismo, la entidad dejó claro que la alta funcionaria no compró vivienda en este sector, por lo que se desconoce si vive allí en calidad de arriendo o alguna otra modalidad.
SEMANA buscó en portales de compra y venta de vivienda y los resultados arrojan que los inmuebles que aparecen allí, ubicados en Dapa, están en su mayoría entre los 1.500 y los 3.500 millones de pesos.
Frente a los arriendos, la búsqueda arroja que el alquiler de alguna de estas viviendas, en la mayoría de los casos, está por encima de los cuatro millones de pesos.
En este sector del Valle del Cauca también tienen propiedades familias adineradas y líderes políticos de este departamento, como la exgobernadora y presidenta del Partido de la U Dilian Francisca Toro.