SEMANA: ¿Cómo tomó la decisión del Gobierno de ordenar la designación de un nuevo rector desconociendo la elección de José Ismael Peña?
Moisés Wasserman (M. W.): Si le dijera que me sorprende, estaría diciendo una mentira, no me sorprende, me deja tremendamente descorazonado. Esto atenta contra la Constitución de Colombia, contra la tradición universitaria de muchos años que es otorgar a la universidad una autonomía y un derecho a dirigirse ella misma sin intervención de la Fuerza Política. Esta es una directa intervención del Gobierno en los asuntos de la institución académica. Es tremendamente descorazonador y desmoralizante.
SEMANA: ¿Por qué dice que es el fin de la autonomía universitaria?
M. W.: Pues porque la autonomía universitaria es eso, es una concesión que le da la sociedad a la universidad de regirse por sus propias normas y de dirigirse con sus propias instituciones. Esto se sale absolutamente de todas las normas, es una orden impuesta por el poder político que afecta a la autonomía.
SEMANA: ¿Qué cree que se deba hacer después de esta “orden” del Gobierno?
M. W.: Yo esperaría que los juristas demanden este acto que, en mi opinión, es abiertamente inconstitucional. Yo no soy jurista, pero espero que puedan demandarlo. El acto no es ilegal, es inconstitucional.
SEMANA: Mientras tanto, ¿qué debe hacer José Ismael Peña? ¿Seguir en el cargo?
M. W.: Francamente, no lo envidio, me imagino que con una orden de estas por parte del Gobierno, se reunirá el Consejo Superior Universitario. Ellos (el Gobierno) han hecho esfuerzos para reconfigurarlo. Yo no envidio al doctor Peña, me parece que han hecho una tremenda injusticia con él. Es un profesor veterano de la universidad y tenía toda la buena intención de servirle a la institución.
SEMANA: ¿Debe respetarse la elección de José Ismael Peña?
M. W.: La elección de José Ismael Peña fue absolutamente legal, fue hecha de acuerdo con las normas de la universidad; el Consejo Superior finalmente lo aceptó por mayorías tras nueve horas de discusiones donde estuvo presidido por la ministra de Educación (Aurora Vergara). Personalmente, no lo conozco bien, lo he visto algunas veces, nos hemos encontrado con él después de muchos decenios de trabajo en la universidad. Es una persona con unas capacidades, tiene buena voluntad y –reitero– fue nombrado por el Consejo Superior Universitario. No veo por qué no pueda ser rector.
SEMANA: ¿Qué mensaje le envía a Gustavo Petro?
M. W.: Me parece que es algo terrible lo que hizo, lo que está haciendo el Gobierno, está rompiendo con la autonomía universitaria y lo hace asumiendo una posición de virtuosos cuando en realidad lo que están haciendo es en contra de toda la estructura universitaria, de los principios de la alma mater, es algo tremendo. El único antecedente parecido que se me ocurre –y menos grave porque antes de la Constitución el presidente nombraba al rector que quería–, es cuando el general Gustavo Rojas Pinilla nombró a un coronel como rector de la Universidad Nacional.
SEMANA: Conclusión: ¿Petro está interviniendo a la Universidad Nacional?
M. W.: Absolutamente, es una intervención directa del Gobierno. Ni siquiera es una propuesta sutil o sugerencia, es una orden en 24 horas, es como si fuera una orden de un sargento a los soldados, no es una propuesta de un ministro, reitero, es una orden. Eso es absolutamente inaudito.