El alto comisionado para la Paz, Otty Patiño, le respondió fuerte y claro al comandante del ELN, Antonio García: sobre la mesa del Gobierno nacional no está la posibilidad de pagarle a esa guerrilla para no secuestrar.
García, quien no participa de la delegación del ELN que está en los diálogos de paz con el Estado colombiano, pero sigue comandando ese grupo armado, insiste que el país debe pagarles para que dejen de usar el secuestro como mecanismos de financiación.
Pero el comisionado Patiño es claro: “Esa discusión con el ELN sobre financiamiento ya se dirimió en el último ciclo. Ellos se comprometieron a no hacer secuestros extorsivos (económicos) sin contraprestación alguna y a desarrollar un protocolo específico sobre ese asunto asociado al respeto al DIH que prohíbe la toma sistemática de rehenes para beneficio propio”.
Ese acuerdo surgió en diciembre durante el quinto ciclo de conversaciones entre el Gobierno y el ELN, para el que la guerrilla se comprometió a dejar de secuestrar a partir del 30 de enero de 2024. Sin embargo, tras el cierre de ese ciclo García estuvo publicando entradas en su blog, en las que condicionó el fin del secuestro a que el Estado les dé plata.
Textualmente, el comandante eleno defendió: “Es de sentido común que estos tres asuntos mencionados están relacionados, tal como aparecen redactados en los textos: 1) prórroga del cese el fuego temporal, 2) suspensión de retenciones con fines económicos y 3) la financiación; donde el punto 2 no podrá darse sin el 3, mejor dicho simultáneamente, para que todos seamos interpretados”.
Pero el Gobierno no está pensando en financiar al ELN mientras este grupo siga siendo una guerrilla. Otty Patiño sostiene que “Antonio García no ha querido aceptar plenamente estos acuerdos y ha hecho pronunciamientos equívocos que han confundido a la opinión pública”.
Empero, en la mesa sí se está debatiendo el tema de financiamiento de una forma separada, con miras al posacuerdo y con una metodología que no está asociada con el secuestro.
¿Cómo será la financiación al ELN?
El alto comisionado para la Paz aclaró que para que haya financiamiento debe darse el fin del conflicto con una transición de una fuerza rebelde en armas a una organización política de carácter civil.
“Hasta que no haya hechos y actitudes claras sobre esta transición irreversible, la financiación por el Gobierno o por la comunidad internacional no será posible. Se financiará para la paz y no para mantenerse en pie de guerra, que es lo que pretende García”, sostuvo el funcionario, quien hasta el año pasado estuvo a cargo de las negociaciones con ese grupo armado.
Hay otro camino mediante el que los elenos podrían conseguir financiación estatal que el comisionado describe como el de las “transformaciones territoriales” y que está condicionado a que sus integrantes se conviertan en agentes de paz.
“En la medida que los activos armados del ELN se conviertan en activos de construcción de paz en los territorios podrán gozar de beneficios económicos y jurídicos que los habiliten como ciudadanos plenos. Pero no haremos el juego a ninguna combinación de formas de lucha legales e ilegales, armadas y no armadas. Eso no. Eso es intolerable e inadmisible así no le guste al señor Antonio García”, sentenció Otty Patiño.
Además de la clara negativa del Gobierno, hay otro impedimento para los intereses del comandante guerrillero: el ELN es catalogado como un grupo terrorista y el Estado colombiano simplemente no puede financiarlo mientras mantenga esa categoría.
El integrante de la delegación y presidente de Fedegán, José Félix Lafaurie, apuntó: “Tú no puedes financiar un grupo en armas y, mucho menos, que esté catalogado como terrorista por las organizaciones internacionales. Estas son unas negociaciones de paz y no para que una parte, en este caso, el ELN, la aproveche para poder mejorar su capacidad de agresión frente a la sociedad”.
Entonces, aunque Antonio García insista en sus columnas que deben financiar al ELN, ese asunto es una línea roja para el gobierno de Gustavo Petro mientras no se selle la paz.