Susana Gómez, representante del Pacto Histórico conocida como Susana ‘Boreal’, causó polémica con su opinión sobre la educación para niños y adolescentes. De acuerdo con la congresista del petrismo, obligar a un niño a asistir al colegio “es una forma de violencia”.
“Siento que obligar a un niño a asistir al colegio... A mí me parece que es una forma de violencia y una forma muy evidente de adoctrinamiento porque es obligar el tiempo de una persona, que está en un lugar en el que muchas veces no quiere estar”, manifestó la congresista.
De acuerdo con Gómez, garantizar que un niño vaya al colegio “no quiere decir que tenga calidad o que vaya a tener un montón de cosas”.
“El sistema educativo está muy mandado a recoger. El sistema educativo muchas veces no funciona por diferentes razones. Hay muchos niños que simplemente no quieren ir a estudiar y se enferman, un montón de cosas, porque son ambientes superhostiles”, dijo.
La congresista de gobierno criticó que se metan a 40 o 50 niños en un salón con una profesora o profesor “sin garantías”. Además, cree que los prepara para la “explotación laboral” de las empresas.
“Todas las cosas en contra. Nosotros pretendemos que sea una educación de calidad. Lo que realmente estamos haciendo es preparándolos para la explotación laboral que viene después. Que se metan a una empresa también, un montón de horas al día sin poder después descansar y tener un montón de tiempo para poder hacer lo que se les dé la gana o tiempo para estar con sus familias”, indicó.
También criticó el sistema de salud: “Uno tiene que estar un montón justificando un montón de enfermedades para poder faltar y poder descansar. El sistema está supermal”.
Y pidió reflexionar sobre qué tanto se está obligando a las personas a que tengan que ir al colegio “en una época de mayor creatividad”. Además, dijo que la mayor parte del contenido que se les dicta no les va a servir para “absolutamente nada”.
“Una época en la que pueden de verdad desarrollarse como personas, pero no. Tienen que estar sentados en una silla ocho horas, escuchando un montón de cosas que la mayoría no les va a servir para absolutamente nada en sus vidas”, manifestó.
Con base en estos argumentos, la congresista del petrismo invitó a sus compañeros de la Comisión Sexta de la Cámara de Representantes a reflexionar.
“No estemos imponiéndole a la gente cosas que van en contra de su voluntad y que también respetemos la voluntad de niños y niñas. Como sancionamos a los padres por no obligar a los niños, por ejemplo, si un niño no quiere ir a estudiar porque le están haciendo bullying o porque tiene unas necesidades, por ejemplo, que no se aguanta unas luces. Estas luces, superblancas, que nos dan en la cara. O el ruido de un montón de niños o simplemente porque el niño no quiere compartir con otros niños (sic)”, expresó.
Y concluyó: “Entonces los estamos obligando a que tengan que estar, y además obligando a los papás a que obliguen a sus hijos a ir al colegio”.