La política de paz total del presidente Gustavo Petro cada día está más enredada, pues los grupos criminales no muestran voluntad de paz y siguen delinquiendo en todo el territorio nacional.
El diálogo con el ELN —que, aparentemente, era el que más avanzado estaba— se estancó y desde hace unos meses los acercamientos quedaron en el limbo por los chantajes del grupo criminal al Ejecutivo.
En medio de todo este panorama, el comisionado de paz Otty Patiño reconoció que dichas conversaciones están pasando por un mal momento y que todo está en manos de los elenos, por si quieren seguir hablando de paz.
“No ha habido respuesta a los llamados que les hemos hecho. Está agonizando (el diálogo), pero ellos son los únicos que le pueden poner oxígeno, pero no poniendo bombas, matando gente ni atacando oleoductos”, dijo el funcionario.
Patiño, contrario a lo que piensan los negociadores del Gobierno Petro, está siendo realista y se ha dado cuenta de que los criminales del ELN solamente se están fortaleciendo y cometiendo todo tipo de delitos en diferentes regiones del país.
Sin embargo, señaló que el Gobierno Petro nunca cerrará la puerta para una salida negociada al conflicto y que en ese orden de ideas son los elenos quienes deben decirles a los colombianos si quieren o no seguir en los diálogos.
“El Gobierno nunca desistirá de los caminos hacia la paz, pero si la otra parte desiste, pues no se puede hacer nada más. El ELN no quiso hacerlo, tuvo oportunidades y no ha querido”, reiteró.
La relación de Patiño con el ELN, a pesar de que fue jefe de la delegación del Gobierno, no ha sido buena y en los últimos meses ha sido blanco de duros ataques de la delegación guerrillera y de Antonio García, máximo comandante del ELN.
Recientemente, Iván Cepeda y Vera Grabe dijeron que los canales de comunicación con los guerrilleros estaban abiertos y que la crisis se superaría rápidamente. No obstante, eso no ha ocurrido y, por el contrario, los elenos siguen haciendo peticiones al Ejecutivo, como que los saquen de la lista de Grupos Armados Organizados para seguir en la mesa e intentar reanudar el cese al fuego bilateral, mecanismo que perdió vigencia el pasado 3 de agosto.
Cepeda dijo: “No vamos a romper el proceso con el ELN”, y es la guerrilla la que debe ser clara con todos los colombianos, porque han tenido todas las garantías del Gobierno.
El pasado 10 de agosto, la delegación de paz del Gobierno Petro hizo una declaración para anunciar al país que el presidente Gustavo Petro había enviado una propuesta confidencial al ELN para retomar el diálogo de paz y resolver las dudas para ampliar el cese al fuego bilateral, que terminó su vigencia el 3 de agosto.
Vera Grabe e Iván Cepeda dijeron que era una muestra de paz del Ejecutivo y que dicha propuesta serviría para continuar negociando, ya que los canales de comunicación entre las partes estaban abiertos.
“Hemos recibido del presidente Gustavo Petro la instrucción de comunicarle al ELN una propuesta confidencial para que sea valorada y nos responda. Es confidencial y no vamos a compartirla, porque debemos respetar las instrucciones y esperando una repuesta positiva”, dijo la jefe de la delegación Vera Grabe.
Sin embargo, el Comando Central del ELN respondió a esa propuesta confidencial y la rechazó de tajo en un comunicado en el que, en principio, dicen que las comunicaciones deberían ser públicas para que el país conozca su contenido.
“La grave situación de crisis que padece la mesa y el proceso de paz entre el Gobierno y el ELN, en este momento, no requiere de ‘propuestas confidenciales’, como lo han dicho Vera Grabe e Iván Cepeda, integrantes de la delegación de diálogos del Gobierno, sino franqueza y claridad al país, tal como lo ha manifestado públicamente el Comando Central del ELN”, dicen los guerrilleros.
Además, indican que el Gobierno Petro debe ser franco con la delegación guerrillera y con los colombianos para determinar si se continuará con la negociación de paz. “Lo que el ELN necesita saber es si el Gobierno va a cumplir lo que firmó, no que hablemos de otras cosas. Pues todo cuanto se hable seguirá en el curso tradicional de los incumplimientos”, reiteraron.