El pasado sábado, el Gobierno de Estados Unidos liberó a Franqui Francisco Flores de Freitas y a su primo Efraín Antonio Campos Flores, dos sobrinos Cilia Flores, esposa del mandatario venezolano Nicolás Maduro, condenados por narcotráfico, a cambio de la excarcelación de siete estadounidenses detenidos en Venezuela.

Los llamados “narcosobrinos” estaban condenados en Nueva York a 18 años de prisión en 2017 por intentar traficar 800 kilogramos de cocaína a Estados Unidos. Los dos gobiernos anunciaron oficialmente el canje casi simultáneamente, aunque el régimen venezolano se abstuvo de dar nombres.

Tras el anuncio del canje, Juan Guaidó, líder opositor, señaló al régimen de operar con “un sistema criminal” y periodistas alertaron sobre intentos para liberar a Alex Saab, presunto testaferro de Maduro y quien se encuentra siendo procesado en Estados Unidos.

Este martes, la senadora Paloma Valencia expresó su desacuerdo ante una eventual liberación de Saab. De acuerdo con la congresista del Centro Democrático, si él sale de prisión, “se iría con toda la información sobre el lavado de activos y corrupción que incluso vinculaba a líderes colombianos”.

“Lo de claudicar ante el régimen tiránico de Maduro es en serio: liberan los sobrinos, lo nombran garante y ahora nos anuncian que podría ser liberado Álex Saab. Se iría con toda la información sobre el lavado de activos y corrupción que incluso vinculaba líderes colombianos”, fue el mensaje que publicó Valencia en su cuenta de Twitter.

Cabe recordar que Saab desde el año 2017 ha sido acusado de ser el presunto testaferro del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y en el mes de agosto se conoció un movimiento denominado ‘Free Alex Saab’, quien fue nacionalizado como venezolano y extraditado a Estados Unidos. Esto, luego de un largo proceso tras su aprehensión en Cabo Verde, donde intentaba presentarse como diplomático de la era chavista en Venezuela.

Los estadounidenses liberados

En Caracas, el gobierno de Maduro, a quien Washington no reconoce como presidente, afirmó que “se ha logrado la liberación de dos jóvenes venezolanos injustamente apresados” en Estados Unidos como “producto de distintas conversaciones realizadas desde el pasado 5 de marzo”.

Confirmó la liberación de un “grupo de estadounidenses” detenidos en Venezuela “por razones humanitarias”.

Los primeros cinco detenidos citados por el presidente estadounidense –cuatro estadounidenses nacidos en Venezuela y un venezolano residente permanente en Estados Unidos– son exdirectivos de la refinería Citgo acusados de corrupción en el país caribeño y condenados a entre ocho y 13 años de prisión.

Un sexto líder de Citgo, Gustavo Cárdenas, quien fuera vicepresidente encargado de relaciones estratégicas de esta filial estadounidense de la estatal petrolera de Venezuela PDVSA, fue liberado en marzo. Ese mes quedó en libertad otro estadounidense, Jorge Alberto Fernández, tras la inesperada visita de enviados estadounidenses de alto nivel a Caracas.

Matthew Heath es un exmarine detenido hace dos años y procesado por “terrorismo”. Osman Khan es uno de los tres estadounidenses detenidos este año en la frontera con Colombia.

El canje se llevó este primero de octubre “en un país entre Venezuela y Estados Unidos” donde aterrizó un avión con los dos prisioneros venezolanos y otro procedente de Venezuela con los siete estadounidenses. Posteriormente, “los pasajeros partieron en aviones diferentes de aquellos en los que llegaron”.

Venezuela ha liberado en total a nueve estadounidenses. Permanecen detenidos al menos otros cuatro, los exmilitares Luke Denman y Airan Berry, condenados a 20 años de prisión por supuestamente participar en un plan para derrocar a Maduro en 2020, y otros dos ciudadanos que ingresaron por la frontera con Colombia.