El respaldo de la vicepresidenta Francia Márquez a la primera línea este 1 de Mayo parece que no terminará en un solo anuncio de una tarima. Llegará a los estrados judiciales.
La senadora Paola Holguín y el representante Juan Espinal, ambos antioqueños y dirigentes del Centro Democrático, anunciaron que denunciarán a la vicepresidenta ante el fiscal general, Francisco Barbosa, por el presunto delito de abuso de autoridad por acto arbitrario e injusto.
“La denuncia se presenta por las manifestaciones públicas de apoyo a las acciones de la primera línea, en un mitin del Día Internacional del Trabajo, en Santiago de Cali”, confirmaron ambos.
Según Holguín y Espinal, lo afirmado por la vicepresidente constituye una exteriorización de una valoración subjetiva que reivindica la legitimidad de las acciones violentas de ese grupo. Además, “desacredita la acción judicial emprendida en contra de algunos de sus miembros por parte de la rama judicial”.
Añadieron que Francia Márquez, como cualquier otro servidor público, está obligada constitucional y legalmente, a respetar la independencia judicial y a colaborar con el buen funcionamiento de la justicia. Por tanto, “resultan inaceptables sus declaraciones”.
“Mal hace una servidora pública como ella haciendo apología del delito”, resumió la senadora Holguín, una de las más fuertes contradictoras del gobierno de Gustavo Petro.
Por su parte, el senador Juan Espinal, otro crítico del gobierno, dijo que el país no puede olvidar que la primera línea generó violencia, terror e incertidumbre entre los colombianos en el 2022.
“Con esta denuncia, en nombre de los colombianos, rechazamos el apoyo y la complicidad de la vicepresidente con este grupo. No se puede permitir la apología al delito, no se puede permitir que un funcionario público le leva la cara a los delincuentes, no se puede permitir la impunidad en el Estado colombiano”, aseguró.
Textualmente, Francia Márquez, dijo en plaza pública en Cali: “Hay quienes dicen que por qué estoy aquí, porque esperan que me quede allá en la casa de Nariño metida, pues no y se jodieron porque yo soy una mujer de territorio, yo soy una mujer del pueblo y por eso hoy estoy con ustedes marchando, reivindicando los derechos de los trabajadores y trabajadores de este país”, afirmó.
“Y empiezo pidiendo un minuto de aplausos por los hombres y mujeres trabajadoras de este país que fueron asesinados por la oligarquía. Un aplauso enorme para esos líderes y lideresas, hombres y mujeres que levantaron la voz de lucha y resistencia”, puntualizó fuertemente la vicepresidenta.
“Que no me da miedo decir aquí qué viva la primera línea… A estos jóvenes que les dieron bala hace dos años, los que nos decían estamos dejando el cuero en las calles y que vilmente muchos los asesinaron, a otros les sacaron los ojos, y a otros los han encarcelado. Y aquí le dice el pueblo hoy, estamos con ustedes y no nos olvidamos de ustedes”, añadió.
Esas palabras generaron un tsunami político por parte de los contradictores de la vice. De hecho, motivaron a un concejal de Cali, del Centro Democrático, a promover que la declaren como persona no grata en la capital del Valle del Cauca porque esa región del país pagó el mayor costo de los desmanes de la primera línea.