Pastor Alape, exmiembro del Secretariado de las Farc que firmó el acuerdo de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos, paró en seco al presidente Gustavo Petro luego de que se diera golpes de pecho diciendo que se debe cumplir el acuerdo de paz firmado con esa antigua guerrilla.
“Presidente Gustavo Petro, se requiere más acciones de implementación y menos retórica. Usted desmontó la arquitectura de la implementación, a pesar de que en marzo del año pasado, en Mesetas (Meta), se comprometió a restablecer la alta consejería para la implementación y no cumplió”, reclamó Alape.
Lo que generó la molestia de Alape fue el mensaje de Petro en el que cuestionó de frente a quienes firmaron ese acuerdo. El mandatario dijo que supuestamente se ha incumplido lo que se firmó y que por eso se debe revisar y cumplir.
“A mí personalmente no me interesa para nada la reelección, pero los que sí se aprovecharon de ella y convocaron a la guerra y a la paz ahora proponen golpes de Estado. La razón es una: incumplieron. No sabían lo que firmaron. La declaración unilateral de Estado, según la Convención de Viena, obliga a las partes a cumplir lo acordado y a ajustar la normatividad interna para garantizar el cumplimiento. Nos quedan tres tareas: leer la convención de Viena, leer el acuerdo de paz y cumplir”, afirmó el mandatario en las últimas horas.
La idea de Petro ha generado un fuerte cruce de mensajes entre quienes firmaron ese acuerdo y el mandatario. Uno de los que le reclamó fue el expresidente Juan Manuel Santos, quien considera que lo pactado no puede ser una vía para buscar una asamblea nacional constituyente.
“Usar el acuerdo de paz para convocar una constituyente es un absurdo. Esa fue precisamente una de las líneas rojas que mantuvimos en la negociación. La teoría de que el acuerdo es especial, que pueden modificar las partes contratantes, tampoco tiene asidero jurídico porque los acuerdos especiales presuponen que el conflicto entre las partes continúa. Y ese no fue el caso entre el Estado y las Farc”, aseguró el exmandatario.
Además, fue enfático en decir que una asamblea nacional constituyente solo se puede convocar usando los procedimientos que establece la Constitución. Y que cualquier intento de hacerlo por otra vía se enfrentaría con los poderes Legislativo y Judicial, las Fuerzas Armadas y la mayoría de los colombianos.
“Invito al Gobierno a concentrarse en resolver los crecientes problemas que aquejan a la población. Una de las formas de hacerlo es implementar el acuerdo de paz, que no requiere ni constituyente ni acuerdos especiales, sino voluntad política y capacidad para traducir las intenciones en realidades”, afirmó Santos.
Otro de los que frenó a Petro fue el senador Humberto de la Calle, quien se desempeñó como jefe negociador del Gobierno en ese proceso con las Farc. Dijo que la tesis de que en el acuerdo de paz quedó abierta la posibilidad de una constituyente es errónea.
“El plebiscito fue lo que se pactó para evitar ese camino de la constituyente que siempre estuvo fuera de consideración por parte del Gobierno. Por lo tanto, tengo que declararles a los colombianos que no es cierto que en lo acordado esté implícita la autorización para buscar una constituyente. Y menos aún la tesis de que las partes sencillamente se ponen de acuerdo por fuera de la legalidad colombiana, a través del Consejo de Seguridad y otras ideas descabelladas, e impone una constituyente por fuera de las normas constitucionales. No podemos olvidar que hoy una constituyente está regulada en la Constitución y exige una ley del Congreso; por lo tanto, yo diría que si el Gobierno tiene interés en una constituyente, que presente el proyecto”, aseguró el senador y exjefe negociador.