Sorpresivamente, el presidente Gustavo Petro realizó una alocución que no estaba en su agenda oficial de este miércoles 4 de septiembre, en donde le habló al país, mencionando el paro camionero que cumple 3 días, calificándolo de “empresarial” y que “tiene intereses oscuros económicos y políticos”.
Nuevamente, Petro atacó a los transportadores, señalando de manera directa que no es una protesta social, como el pasado estallido social, sino empresarial.
Aunque empezó la alocución señalando que no iba a hablar sobre el paro camionero, terminó haciendo una mención, descalificando el reclamo de los transportadores, quienes entraron en paro por el aumento de la tarifa del diésel.
Más temprano, el presidente había hecho referencia al caos vehicular que se registra en varias regiones del país por el paro del gremio de los camioneros.
La atención del mandatario colombiano se centró en los bloqueos y envió un mensaje a los camioneros, indicando que el país no se dejará.
“Aunque se presumiera por obvias razones que voy a hablar del paro camionero, no voy a hablar de él, sino de algo que me parece todavía más preocupante. Aunque sobre este primer punto solo mencionaré –ya tendré oportunidad de hablar a profundidad mañana o pasado– que sabemos distinguir perfectamente qué es un paro empresarial, (que) en inglés se llama lock-out”, sostuvo Petro.
Y manifestó en su declaración: “Siempre tiene oscuros intereses económicos o políticos de un movimiento social, como ocurrió con el estallido en gobierno pasado. El movimiento social siempre tiene reivindicaciones justas. Ya hablaremos mañana o pasado de esta diferenciación que haremos”.
Por otro lado, un alarmante mensaje publicó el presidente de la República en medio del paro de camioneros que se registra en varias regiones del país, el cual podría calentar la movilización de los transportadores.
Por medio de su tribuna favorita, su cuenta personal de X, antes Twitter, el mandatario colombiano pidió a la “clase obrera salir a defender el país”, hecho que podría desatar una aguda confrontación en momentos de alta tensión por el paro de camioneros.
“La clase obrera hoy debe salir a defender el país. No es pueblo contra pueblo. Eso es lo que quieren. Es ayudando a resolver una agenda de los pequeños camioneros que permita que el país no sufra el déficit que nos llevaría a mantener las desigualdades sociales y que al mismo tiempo el mercado de la carga tenga más presencia del pequeño camionero”, posteó Gustavo Petro.
Y añadió el jefe de Estado: “Es logrando extender al máximo los sindicatos de choferes de las grandes empresas camioneras y de transporte público del país, empezando por TransMilenio”.
“Aprovechemos el tiempo del paro para realizar las grandes asambleas de sindicalización. El Gobierno apoyará por completo la legalización sindical de los trabajadores del transporte”, avanzó en el mensaje el mandatario colombiano.
Entre tanto, el Gobierno de Colombia elevó este miércoles 4 de septiembre un “llamado urgente” para que los transportistas que protestan contra el alza en el precio del diésel habiliten “corredores de abastecimiento”, ante alertas de escasez de alimentos en varias ciudades.
Cientos de vehículos de carga bloquean desde el lunes total o parcialmente las vías de acceso a Bogotá y a las principales ciudades de Colombia, en respuesta a un aumento de casi 2.000 pesos colombianos, equivalente a 46 centavos de dólar, en el galón (3,8 litros) de diésel.
“Hacemos un llamado urgente a todos los actores involucrados para que se garantice un paso prioritario y sin restricciones a los vehículos que transportan alimentos y productos esenciales”, se advierte en un comunicado del Ministerio de Agricultura.
Sumado a ello, el Gobierno del llamado cambio propuso crear “corredores de abastecimiento” para “un tránsito seguro y rápido” de alimentos y productos perecederos. También alertó sobre “pérdidas significativas” por los cierres de vías. Desde el sábado, la administración de Gustavo Petro aumentó el precio del combustible que usan la mayoría de los vehículos de carga.
Finalmente, los mercados de las principales ciudades de Colombia registraron el martes una caída del 23 % en el abastecimiento de alimentos con respecto a la semana anterior, se indicó el miércoles en el boletín diario de precios mayoristas de la autoridad estadística. En Bogotá (centro), Corabastos –la mayor central de abastos del país– se vio afectada por una variación del -40,3 % en la última semana.