En medio de la tormenta política que se desató en el país por las recientes declaraciones que dio el excanciller Álvaro Leyva, sobre los acuerdos de paz de La Habana y un llamado a una constituyente que se debe cumplir, el presidente Gustavo Petro le salió al paso a la controversia.

Desde Popayán, en el departamento del Cauca, el jefe de Estado manifestó que su deseo no es reelegirse en el poder, al indicar que su intención es que se puedan cumplir los acuerdos firmados con la antigua guerrilla de las Farc, los cuales se suscribieron en el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos.

“No, yo no me quiero reelegir, yo quiero que esto se vuelva realidad, porque para algo lo firmaron, porque lo que produce violencia en Colombia es incumplir, incumplir un acuerdo de paz en una magnitud tal que se convierte en un documento que es declaración unilateral de Estado ante el mundo”, dijo Petro.

Presidente Gustavo Petro | Foto: Presidente

Y avanzó en su tesis: “No se puede hacer ese crimen con la historia de Colombia, porque condenamos generaciones enteras hacia adelante a seguirse matando entre sí. Nosotros podemos ser un país enorme y grande. Entonces necesito el plan de ese territorio en materia de condición para vivir”.

El revuelo se generó porque esta semana el excanciller Álvaro Leyva publicó un video en el que hizo referencia a la paz total planteada por el presidente Gustavo Petro y recordó el acuerdo de La Habana, donde dijo que se contempla un mecanismo como la constituyente.

“La paz total es con todos, lo tengo reseñado en mayúsculas, a nadie se le va a pedir permiso para lograrla y rápido, la gozará con orgullo y satisfacción todo el pueblo de Colombia. Obviamente, se darán las explicaciones del caso, el cómo el presidente Petro viene siendo el constructor de los pasos que siguen, bienvenidos todos ellos”, sostuvo Leyva.

Excanciller Álvaro Leyva. | Foto: Juan Carlos Sierra

Asimismo, el excanciller se refirió al acuerdo de paz con las Farc. “Tuvo razón el presidente Gustavo Petro al anunciar que cumplirá su compromiso con el Consejo de Seguridad de la ONU y el mundo. Lo ha manifestado porque entiende que se trata de la palabra del Estado la que está en juego. A propósito de ello, nos hemos cruzado notas de parte de él con una generosidad que yo agradezco. Queda claro que sí tuve algo que ver con los acuerdos de La Habana”.

“El presidente, en medio de graves retos, de momento ha dejado entrever la solución definitiva. A su manera ha venido edificando la antesala de lo que habrá de ser una fórmula para resolver un sinnúmero de dificultades, y no exclusivamente porque sea su obligación cumplir, sino porque esta coincide integralmente con el pensamiento previamente manifestado”, aseguró Leyva.

Palacio de Nariño | Foto: GUILLERMO TORRES

Frente a un mecanismo como el de la constituyente, Leyva dijo: “Reza así uno de los fundamentales apartes que le corresponde implementar: “(…) con el ánimo de consolidar aún más las bases sobre las que se edificará la paz y la reconciliación nacional, una vez realizado el procedimiento de refrendación, convocará a todos los partidos, movimientos políticos y sociales, y a todas la fuerzas vivas del país a concertar un gran ACUERDO POLÍTICO NACIONAL encaminado a definir las reformas y ajustes institucionales necesarios para atender los retos que la paz demande, poniendo en marcha un nuevo marco de convivencia política y social”.

Este apartado es el que consigna la constituyente, según la explicación de Leyva a SEMANA. Afirmó que está consignado en el documento del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Desde hace varios meses, Petro ha propuesto la necesidad de convocar una constituyente debido, entre otras, al fracaso del trámite de sus reformas en el Congreso. Si se aplica lo dicho por Leyva, entonces, no habría una consulta al Congreso. En una entrevista con el director de Noticias RCN, José Manuel Acevedo, Petro había dicho que, a la hora de pensar en una constituyente y su convocatoria, no era tan importante pensar en las formas, sino en el fondo.

“El acuerdo de paz de La Habana no ha concluido, tanto así que cada tres meses hay que hacer presencia ante el consejo de seguridad para ponerlo al tanto de sus lentos avances de su implementación. Lo que permite advertir que los informes oficiales, que lo acordado no se ha consolidado aún, significa por ende que las figuras altas partes contratantes que tantas veces se refieren los convenios de Ginebra de 1949 y sus protocolos, en el caso de Colombia, siguen vigentes, todo lo cual permite activar su función; ahí están prestos a servir, para acelerar el proceso, con el ánimo de poder afirmar en coro que en efecto los grandes días están por venir”, finalizó Leyva.