SEMANA: ¿Qué es lo que más le preocupa del ‘timonazo’ que le dio Gustavo Petro a la lucha contra las drogas en Colombia?
PALOMA VALENCIA: Me preocupa que Colombia ha venido haciendo un enorme esfuerzo de manera histórica para evitar convertirse en un narcoestado. Ahí se han inmolado grandes líderes como Luis Carlos Galán y miembros de la sociedad, además de soldados, policías que han tratado de impedir que el narcotráfico se tome este país. Esta sería la primera vez que Colombia decide negociar con narcotraficantes de manera indiscriminada. Hay que recordar que Pablo Escobar quiso negociar con el Estado para evitar que no lo extraditaran. Por eso, terminó en una cárcel diseñada y controlada por él, donde seguía delinquiendo.
SEMANA: ¿No cree que es bueno un cambio? La estrategia contra las drogas viene siendo la misma desde hace años y parece perdida: los cultivos de coca siguen en aumento
P.V.: Lo que se necesita es un cambio, pero no se dará de un día para otro. El camino de la legalización puede tomar muchos años, pero no es ningún cambio volver a las negociaciones con los narcos. En Colombia ya se hicieron. Por eso, recuerdo el caso de Pablo Escobar, quien se burló del Estado.
SEMANA: ¿Usted cree que estos anuncios de Gustavo Petro de su nueva lucha contra las drogas van rumbo a una legalización?
P.V.: El presidente Gustavo Petro podría tomar la decisión de legalizar la cocaína de un día para otro, pero tendría unas consecuencias nefastas para Colombia. Inmediatamente, vendría un proceso de desertificación de Estados Unidos y Europa que terminaría cerrando esos mercados para nosotros. Por supuesto, Petro buscará suplirlos con los mercados de Oriente, pero eso también significaría un cambio en los valores democráticos estructurales con los que ha venido funcionando Colombia.
SEMANA: ¿Le preocupa el cóctel del supuesto perdón social, la propuesta de justicia reparativa del ministro Néstor Osuna, el anuncio de Petro del cambio de estrategia en la lucha contra las drogas, la no extradición de narcos que ‘canten’ sus verdades en Colombia? ¿Qué quiere Petro?
P.V.: Gustavo Petro quiere derogar el Código Penal porque se vuelve una herramienta ridícula para el delincuente individual, pero para los grandes criminales lo que hay es lo que llaman ahora el acogimiento: un debilitamiento del Estado de derecho que tampoco traerá la paz. Esto, tal vez, es lo más importante: si usted desmoviliza a quienes son narcotraficantes, hoy no significa que el narcotráfico se acabe, significa que queda en otras manos como ha sucedido con las guerrillas o las disidencias. El problema estructural es el narcotráfico y frente a eso no tienen ninguna propuesta concreta. Supongamos que mañana se legaliza la cocaína, no hay dónde exportarla porque sigue siendo ilegal en todos los países. No hay comprador lícito para la coca, es una ficción.
SEMANA: ¿Qué interés tendría Petro en derogar el Código Penal?
P.V.: Creo que están viendo muy limitadamente la idea de que se dialoga con la delincuencia, ellos dejan de delinquir y se acaban los delitos. Eso no es cierto. Las estructuras de los negocios ilegales persisten y siempre habrá quién se meta en el negocio ilegal y continúe por la vía de seguir delinquiendo.
SEMANA: ¿Todo por el perdón total?
P.V.: Ellos tienen una versión extraña, según la cual, si negocian con toda la delincuencia, el crimen se acaba y cambia de manos. Y no es así.
SEMANA: Petro además anunció la suspensión de las fumigaciones con glifosato. ¿Qué opinión le merece?
P.V.: Con el anuncio de la suspensión del glifosato me da la impresión de que (en el petrismo) no han leído los periódicos. En Colombia el glifosato está suspendido desde 2015. No se ha activado (...).
SEMANA: ¿Esa propuesta de no extraditar a quién favorece?
P.V.: Al hermano de Piedad Córdoba, al nuevo embajador de Nicaragua, también procesado por tráfico de drogas, y a muchos delincuentes con los que se reunieron en La Picota y a los cuales les ofrecieron impunidad a cambio de apoyo político.
SEMANA: conclusión, ¿Petro cumplió lo prometido en campaña?
P.V.: Petro está cumpliendo el Pacto de La Picota.