En medio de la emergencia por la que atraviesa Bogotá por los bajos niveles de los embalses que suministran agua potable, el presidente de la República, Gustavo Petro, volvió a mencionar las fórmulas para solucionar el problema.
En una reflexión que planteó el mandatario colombiano este martes, 29 de octubre, el jefe de Estado habló de la necesidad de que la capital del país tenga un equilibrio con el agua, por lo que dijo que es clave para ese concepto la protección de la reserva Thomas van der Hammen.
De la misma manera, el primer mandatario indicó que otra de las medidas que se debe adoptar en Bogotá es la priorización de la arbolzación por encima de la urbanización, para revitalizar la Sabana de la capital del país.
Sumado a ello, a través de su cuenta personal de X, el mandatario colombiano lanzó un nuevo sablazo contra el exalcalde de Bogotá Enrique Peñalosa, al señalar que sus políticas no son las que se deben aplicar para lograr el equilibro de la ciudad.
“Si se quiere recuperar el equilibrio de Bogotá con el agua, hay que pensar en la reserva Thomas Van der Hammen, en la recuperación del Muña, en la energía solar, en la reforestación de los Cerros Orientales hasta Chingaza, en la revitalización de corredores de biomasa, desde la cordillera oriental hasta la actual selva amazónica, en la arborización, y no en la urbanización de la sabana de Bogotá, en el aprovechamiento de las aguas lluvias. Hoy, Bogotá debe saber que si quiere su reequilibrio con el agua no es el modelo Mazuera/Peñalosa el camino correcto”, posteó Petro.
Cabe reseñar que hace exactamente una semana, el mandatario colombiano encendió el debate al sugerir una drástica medida para ser aplicada en la capital del país, debido a la emergencia por la escasez de agua potable.
En un evento en el que se reunió con soldados del Ejército en Caquetá, mencionó la posibilidad de que un grupo de uniformados evacuaran parte de la ciudad.
“¿Ustedes se imaginan qué tendremos que hacer con una ciudad de 8 millones de habitantes sin agua? Esa realidad que nos puede colocar en una emergencia, hasta nos tocaría llevar a muchos de ustedes allá a ver cómo hacemos para sacar población, para racionar el agua, para ver dónde conseguimos agua, esa realidad del clima que está cambiando que puede acabar con la especie humana porque estos son apenas los primeros indicios”, expresó en esa ocasión Gustavo Petro.
Sumado a ello, anotó el presidente: “La ciudad de Bogotá es la capital de Colombia, y ahí viven 9 millones de personas. Y estamos muy preocupados porque una vez acabe la época de lluvias, que es más o menos diciembre, si es que apuntamos a un clima cada vez más variable, pues el mes de enero, febrero, marzo, sobre todo marzo, el embalse de donde sale el agua potable de Bogotá va a llegar quizás a cero”.
Finalmente, ante las alertas que ha encendido recientemente el presidente Petro sobre el agua potable en Bogotá, el alcalde Carlos Fernando Galán paró en seco al mandatario, al señalar de manera directa que la ciudad no se va a quedar sin el preciado líquido.