En medio del candente debate que se ha desatado en el Congreso de la República, sobre la polémica reforma tributaria que radicó el Gobierno nacional del llamado cambio en el legislativo, cuyo proyecto ha generado una fuerte ampolla en varios sectores políticos, el presidente Gustavo Petro lanzó un mensaje desde Nueva York.
A través de su tribuna favorita, su cuenta personal de X, antes Twitter, el jefe de Estado, hizo un llamado a los gobernadores del país, para que apoyen su controversial proyecto.
En el mensaje que publicó en esa plataforma digital, el mandatario colombiano, reconoció que existe preocupación en los dirigentes departamentales, por el presupuesto.
“Sé que los gobernadores están preocupados por el presupuesto. El alegato de la oposición hablando de un crecimiento de los gastos de funcionamiento no mira en qué consiste ese aumento o lo oculta. Se trata de un incremento por orden constitucional que debe tener el sistema de transferencias a municipios y departamentos, y, por decisión nuestra, al incremento salarial de la fuerza pública incluidos los soldados regulares”, posteó Petro.
Y avanzó en el mensaje: “Lo que sí crece enormemente es el gasto en el pago de la deuda y se debe al sobreendeudamiento que dejó Duque y que debemos pagar”.
“Por eso la ley de financiamiento es fundamental y necesitamos del apoyo de los gobernadores con sus bancadas para aprobarla. La ley de financiamiento no establece impuestos sobre la clase trabajadora o sobre los sectores medios y medios altos de la población”, expresó el jefe de Estado.
También detalló desde Estados Unidos: “Se centra en el impuesto a super ricos, a los juegos por Internet, a la eliminación de privilegios tributarios. Al contrario la ley de financiamiento le baja el impuesto de renta a todas las empresas del país y crea incentivos para la generación eléctrica limpia, incluida la del hogar, el turismo y el paso del transporte a la electricidad”.
Cabe reseñar, que el ministro de Hacienda Ricardo Bonilla radicó el pasado 10 de septiembre, ante la Secretaría de la Cámara de Representantes, la segunda reforma tributaria del Gobierno Petro, esta vez con el fin de ajustar las cuentas para poder financiar el presupuesto del año entrante, estipulado inicialmente en 523 billones de pesos.
La iniciativa, que en este caso se conoce como Ley de financiamiento, propone, entre otras cosas, reducir el impuesto de renta para las empresas, diferenciando por el tamaño de estas. Así, la tarifa general bajaría gradualmente de 35 a 30 %, y hasta 27 % para las micro, pequeñas y medianas firmas.
Bonilla explicó que esa reducción aplicará para todos los sectores económicos, menos petróleo y carbón, que además ya tienen una sobretasa. A eso se le adicionará una ampliación del impuesto al carbón que pagarán los distintos sectores que utilizan ese combustible.
De otro lado, también se ajustaría la tarifa del IVA para productos o servicios que hoy no lo pagan, como las apuestas deportivas en línea o los servicios de hospedaje en casas particulares, tipo Airbnb, o productos que tienen una tarifa inferior a la general, como los carros híbridos que pagan 5 % y se subiría al 19 %. Con la primera medida esperan recaudar unos 2 billones de pesos y con los vehículos híbridos, otros 3 billones.
Bonilla explicó finalmente que el proyecto incluye también beneficios tributarios para algunos sectores como las energías renovables y para el desarrollo del turismo en municipios de menos de 200.000 habitantes, que van acompañados de estímulos que ya existen, como la exención del IVA de los tiquetes aéreos en aeropuertos donde no haya acceso terrestre. “Esto va acompañado de la tarifa del 15 % en renta en aquellos casos en los cuales estén haciendo ampliaciones de instalaciones y tras el reciente acuerdo camionero, se extiende por cinco años la exención del IVA para el proceso de reposición del parque automotor. Pero incluye ascenso tecnológico, no es simplemente sustituir diésel por más diésel, es ir sustituyendo diésel para llegar a un parque automotor eléctrico”, precisó el alto funcionario tras radicar la reforma.