Nuevamente el presidente de la República, Gustavo Petro, encendió la polémica, al realizar esta semana una nueva defensa al fallido nombramiento que había hecho de Daniel Mendoza, como nuevo embajador de Colombia en Tailandia.
Nominación que no prosperó, en medio de una creciente ola de rechazo, que generó el nombre de Mendoza, para ocupar ese importante cargo diplomático, el cual se agudizó por una serie de mensajes que había publicado el creador de la controvertida serie de Matarife.
En esta ocasión, el mandatario colombiano publicó un particular mensaje, por medio de su tribuna favorita, su cuenta personal de X, antes Twitter: “El estalinismo es un sistema de ideas que a nombre de la revolución y la clase obrera, mató la libertad. El caso de Daniel Mendoza me supo más a estalinismo que a feminismo. Aquí las palabras de Gina Sastre excompañera de Daniel durante 26 años”.
Cabe reseñar que el pasado fin de semana, Daniel Mendoza le notificaba al país, a través de un video publicado en sus redes sociales, que el Gobierno de Tailandia le había dado el beneplácito para su llegada a la embajada de Colombia en ese país. Pero señaló que había declinado a ocupar ese cargo.
“Le cuento a mis seguidores que el Gobierno de Tailandia dio el beneplácito a mi nombramiento y, como ya saben, el presidente Petro persiste en darme su apoyo, hecho que me tiene profundamente conmovido. Es decir, allá en Bangkok me espera una deliciosa embajada a la que decidí dejar plantada”, expresó en ese material Daniel Mendoza Leal.
De la misma manera, detalló en el video que publicó en sus redes sociales: “Este tsunami de ataques me hizo volver el tiempo atrás, a mis motivos y razones, a por qué lo hice todo, a sincerarme conmigo mismo y entender que aceptar esa embajada repleta de lujos, me obligaba a enterrar mis gritos, mi rabia y mi dolor, a dejar la producción de la nueva serie que fui a filmar a Bangkok, ciudad de la que me enamoré perdidamente y, sobre todo, a tapar con el dorsal de las buenas costumbres diplomáticas, mi necesidad inaguantable de decir la verdad”.
Y concluyó con la idea el creador de Matarife: “Aceptar esa embajada sería meter otra vez mi alma en la prisión en la que vivía cuando este cuerpo caminaba precisamente por los pasillos del Club El Nogal”.
Por otro lado, y al parecer, el único que estaba feliz con ese nombramiento dentro del Gobierno era el presidente Petro, en una ocasión así lo defendió: “Por ahí me están diciendo que no puedo nombrar al señor Mendoza de embajador, el que hizo Matarife, porque salieron unas fotos de él desnudo con unas señoras. Las señoras no dicen que fueron a la fuerza, sino que les gustó el momento. ¡Oiga! Cómo esperan que un gobierno libertario y progresista prohíba el amor y hacer el amor, ni que fuera Pinochet”.
“Yo no soy Uribe, no soy un cura rezandón, yo soy un emancipador y el amor hace parte del ser humano y es su principal fuerza liberadora, háganlo como lo hagan siempre”, expresó el jefe de Estado en ese momento, defensa que también encendió las redes sociales, generando un profundo rechazo.