Luego de un acuerdo al que llegaron las autoridades distritales y los indígenas emberá en Bogotá, el presidente Gustavo Petro se refirió a la problemática humanitaria que atraviesa ese tipo de resguardos en la capital del país.
A través de su tribuna favorita, su cuenta personal de X, antes Twitter, el mandatario colombiano desde Europa –donde adelanta una agenda de trabajo– propuso el “establecimiento indígena en Bogotá en condiciones de dignidad cultural”.
“En verdad, el verdadero acuerdo debería ser o el retorno voluntario con garantías de no repetición de las condiciones del desplazamiento y la inversión estatal en la vía al resguardo. O el establecimiento indígena en Bogotá en condiciones de dignidad cultural”, posteó Petro.
Sin embargo, la situación de la comunidad indígena emberá asentada en Bogotá se agrava con cada día que pasa. Los emberá katío han decidido permanecer en el centro de la ciudad, incluso pasando la noche en cajeros automáticos para resguardarse del frío, con el fin de que sus peticiones sean escuchadas por el Gobierno nacional: presencia del Estado en los territorios a los que pertenecen –principalmente en Chocó– y garantías de seguridad ante la arremetida del Clan del Golfo y las Disidencias de las Farc.
Sumado a ello, el pasado domingo 9 de junio se vivieron momentos de angustia en el Parque Nacional, luego de que una bebé de tan solo tres meses presentara complicaciones en su salud. Al ver lo que estaba pasando, la misma comunidad llamó a una ambulancia.
“Al iniciar la valoración, el equipo de salud se encontró con una menor de edad de 3 meses, con rigidez y pupilas midriáticas. El médico regulador confirmó menor fallecida y solicitó apoyo por parte de Policía y Red de Emergencias para atención en el lugar”, dijeron desde la Alcaldía en un comunicado.
El cuerpo de la pequeña se encuentra en Medicina Legal, adonde fue trasladada por funcionarios de la Fiscalía General de la Nación, donde se le realizará la autopsia para determinar la causa de su muerte.
De acuerdo con el concejal Daniel Briceño, “la niña falleció de 3 meses y 5 días”. Según el cabildante, el padre tiene 31 años, la madre 24, y la menor tenía tres hermanos más, dos de 9 y 7 años, y otro de 22 meses de nacido.
El Distrito advirtió que la Secretaría de Gobierno, Secretaría de Salud, Policía y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) brindan acompañamiento a los padres de la menor, quienes deberán acudir a la Fiscalía de Puente Aranda para presentar entrevista ante fiscal, y se les entregará el acta para poder retirar de Medicina Legal el cuerpo de su hija.
“La administración distrital expresa sus condolencias a la familia de la menor y su comunidad; además, reitera su compromiso de seguir implementando acciones de atención y cuidado”, añadieron en el comunicado.
Por último, insistieron en el llamado al Gobierno nacional para seguir en un trabajo mancomunado para la atención integral de la comunidad emberá y que se realicen todas las acciones necesarias.